En el día del periodista no solo se conmemora la increíble labor diaria de cada comunicador desde la creación del primer diario del país, también se recuerda un crudo hecho, el asesinato de Santiago Leguizamón, un trabajador incansable de la prensa local que fue envestido por sicarios en la frontera con el Brasil.
El periodismo como profesión dota de dificultades como cualquier otra carrera laboral y por ende, también se vio rebasado por los diferentes cambios ocurridos a raíz de la pandemia del coronavirus; cambios en la metodología de trabajo, desde hacer una entrevista por videollamadas hasta mantener un metro y medio de distancia al conversar con las fuentes.
En tiempos duros donde las falsas noticias se viralizan rápidamente, el esfuerzo del periodista debe ser más minucioso, ya que cada información es fundamental.
“Como decía Tyrion, el personaje de Juego de tronos, si algo siguen los hombres (y las mujeres) es una buena historia. Un relato tiene más fuerza que la espada o la bandera. Y eso es el periodismo. Y para que la narración produzca adherencia, el narrador debe ser creíble. Esto es así desde los albores del periodismo y lo seguirá siendo independientemente del formando o la plataforma de la narración”, afirmó el referente del canal de aire Telefuturo, Luis Bareiro.
Recalcó también que en tiempos oscuros como los de esta pandemia la gente recurre nuevamente a la prensa en la que cree.
“Hoy puede que haya más gente leyendo una página digital antes que el papel, o viendo un noticiero antes que un editorial. Pero sigue optando por el medio o el periodista en el que deposita su confianza. Lo demás es puro entretenimiento”, concluyó.