Allanaron dos granjas una en Luque y la otra en Areguá que desde hace años produce aceite de cannabis medicinal, amparado en la Ley 6007/18 “que crea el Programa Nacional para el estudio y la investigación médica y científica del uso medicinal de la planta del cannabis y sus derivados”.
La Secretaría Nacional de Antidrogas (Senad) y la Fiscalía informaron el viernes sobre un gran operativo denominado “GREEN” que consistió en realizar intervenciones en granjas ubicadas en Luque y Areguá. Según se halló “cultivos de marihuana” y elementos que “indican procesamiento y comercialización de drogas”. Asimismo, aseguraron que “los mismos no cuentan con autorización alguna de las autoridades competentes”.
“Estaría transgrediendo normativas de la ley de drogas relacionadas al cultivo ilícito de marihuana, pues independientemente de que el objeto de la misma sea la supuesta elaboración del aceite de cannabis, dicha actividad sigue siendo ilícita”, expresó el comunicado de la secretaría de Estado.
Se trata de un vivero utilizado por el abogado, empresario y activista por la regularización del cannabis, Juan Carlos Cabezudo, quien fue detenido por las autoridades. La SENAD encontró en el lugar macetas, espigas de marihuana, balanzas de precisión y frascos con pequeñas dosis de aceite de cannabis.
Lo que las autoridades no informaron es que ese lugar es una granja que desde hace años produce aceite de cannabis medicinal, amparado en la Ley 6007/18 “que crea el Programa Nacional para el estudio y la investigación médica y científica del uso medicinal de la planta del cannabis y sus derivados”, que actualmente está vigente.
Tampoco informaron que el ahora detenido, Cabezudo, fue uno de los creadores de la Cámara Paraguaya de Cannabis Industrial, que busca regularizar el cultivo de marihuana, pero con fines medicinales. Atendiendo, que esta granja se dedica a producir óleo de cannabis medicinal con el fin de ayudar a miles de pacientes con Fibromialgia, Parkinson, Epilepsia, Cáncer de huesos, entre otros, entre ellos, niños.
El letrado es muy conocido tanto local como internacionalmente por su lucha para regularizar el consumo medicinal, es propietario “Granja Madre” o “Huerta Madre”, una empresa constituida de forma legal, cuenta con registro único de contribuyente (RUC). Sin embargo, no con permisos de la Senad, de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria y del Ministerio de Salud Pública.
El aceite de cannabis para uso medicinal que se producían en el lugar cuesta en el mercado entre G. 150.000 y G. 250.000, montos muy bajos considerados a los que realmente se comercializan que llegan a ser entre G. 1.800.000 y G. 1.310.000.
La detención del activista fue muy criticada por la ciudadanía e incluso por la organización Mamá Cultiva Paraguay, un grupo de mujeres que cultivan cannabis para tratar a sus hijos con epilepsia o dolores crónicos, quienes a través de un comunicado defendieron que Cabezudo “siempre trabajó a cara descubierta a favor de las personas que requieran el aceite medicinal”.
Incluso comentaron que el fin de semana pasado realizaron la Expo Cannabis, donde se vendieron productos de “Kokuesero”. “Nuestra solidaridad con él, #GranjaMadre. Mientras el Ministerio de Salud y el Ejecutivo nos cerraban la puerta, el ‘aceite artesanal casero’ ha salvado a nuestros hijos”, agregaron en un comunicado difundido a través del Twitter.
Este operativo despertó en muchas personas el procedimiento “selectivo” realizado por las autoridades del Gobierno, que termina desviándose de los verdaderos cargamentos de drogas que nunca quedan en resolver.
En febrero pasado se incautaron 23 toneladas de cocaína en Alemania y Bélgica que salieron de Paraguay, se encontraban escondidos en baldes de latas con denominación “FOX” que debían contener lejía y pintura acrílica. Asimismo, el año pasado fueron incautadas también cerca de 3.000 kilos de cocaína en bolsas con carbón en Villeta. Hasta la fecha aún no se ha llegado a los responsables directos de esos cargamentos.
Recordemos que, recién el año pasado, el Gobierno había concedido las primeras licencias para la producción medicinal de cannabis y en la actualidad existen 12 empresas autorizadas para ello, pero hasta la fecha aún no hay ningún avance al respecto atendiendo que en Paraguay no se tiene la semilla del tipo considerado terapéutico o medicinal, sólo la semilla con que se cuenta es de la planta tipo recreativo, por lo que se debe exportar, habían informado desde la Senad.
“La producción debe ser legal”
“Me parece una contradicción lo del gobierno que autorice la exportación y no quiera producir el famoso aceite de marihuana que es un producto que últimamente circula bastante bajo la mesa”, dijo el diputado Edgar Ortiz, en conversación con el diario El Independiente.
Reconoció que es algo que todo el mundo “está haciendo” y es un producto costoso y que se puede producir en el país.