El deseo de tener hijos conlleva mucha responsabilidad, recursos y preparación no solo para cuidar y atender bien lo que necesite el ser humano primerizo en el mundo sino sobre todo para acompañarlo a lo largo de su vida que cada vez es más larga.
La misma vida que actualmente promete no ser la más adecuada para un nuevo ser humano en el planeta que va explorando formas y destinos para dejarlo en el espacio, epidemias, crisis económicas y políticas que promueven la migración y los problemas particulares de cada terráqueo en su vida. Vivimos tiempos recios.
Volviendo al tema de tener hijos existen varias medidas médicas que se utilizan para evitar concebir una vida humana cómo la ligadura de trompas para mujeres y la vasectomía para el hombre, que es una cirugía que corta los conductos deferentes. Estos conductos transportan los espermatozoides desde los testículos hasta la uretra.
Este procedimiento se está volviendo popular en Francia, el número de usos de este anticonceptivo irreversible aumentó de 1.940 en 2010 a 30.288 en 2022 en Francia, superando ya las esterilizaciones femeninas.
El ser humano es hasta el único ser vivo que decide cuándo y cuantos tendrían que ser progenitores si es que eso está en nuestra agenda. Una cargada con obligaciones que son hasta más importantes que hacerse cargo de una vida humana, que precisa mucho más que afecto y cariño.
Viejas formulas
En 2022, los cirujanos urólogos realizaron nada menos que 30.288 operaciones para cortar los conductos deferentes que conducen los espermatozoides desde los testículos a la próstata, impidiendo así su llegada al pene.
Una realidad que nos lleva a evaluar el presente y futuro de la condición humana no sólo en Francia sino en el mundo. El hogar de muchas personas que viven con o sin ganas pero existen y son respetadas para continuar existiendo en paz con el fin de continuar haciendo nuestras tareas cotidianas.
Muchas de ellas cambian al momento de tener a un nuevo integrante en el equipo familiar, por la extrema atención que precisa para crecer seguro y tener sobre todo la formación y ejemplos de vida para que entiendan lo bueno de lo malo y tiendan a inclinarse por lo primero antes que lo segundo.
Se recomienda una pausa de 7 días de relaciones sexuales luego de una vasectomia lo que asegura la posibilidad de continuar practicandolo una vez la cirugia se haya recuperado y todo esté en condiciones normales para volver al ejercicio del sexo que tiene diversas formas de evitar contraer enfermedades venéreas o que se cumpla el deseo de algunos que consiste en tener un hijo o hija que los acompañe y sea parte del equipo familiar de por vida.
Un compromiso que no se parece al tiempo de nuestros padres y abuelos que han tenido el coraje y la valentía de procrear vidas y que ahora han cambiado notablemente los modos y por sobre todo el número de hijos que uno quisiera traer a la vida.-