“En Clorinda el combustible cuesta G. 3.500 el litro y mañana abren la frontera”, comentarios como estos se pueden leer casi a diario en las redes sociales. Para nadie es un secreto que la suba de precios del combustible tiene inquieta a la población, y el libre tránsito hacia Argentina abre una posibilidad de obtener el combustible a muy bajo costo.
Recapitulando, años atrás las gasolineras de las ciudades limítrofes entre Argentina y Paraguay también recibían a muchos paraguayos que aprovechaban la ventaja económica, incluso aparecieron los paseros, unas personas que cruzaban la frontera para traer gasoil al Paraguay y dedicarse a la comercialización informal.
Tras la apertura de mañana 1ro de octubre, muchas de las problemáticas sociales por las que están atravesando las familias del Paraguay pueden derivar en un aumento del contrabando en las zonas limítrofes de nuestro país.
El ministro coordinador ejecutivo de la Unidad Interinstitucional de Prevención y Combate al Contrabando (UIC), Emilio Fuster, afirmó que mediante el operativo barreras anticontrabando con Brasil y Argentina, en especial este último, atendiendo que estamos en vísperas de la apertura de frontera con ese país y fortaleciendo los controles con las diferentes instituciones, buscarán mitigar y evitar en todo lo posible el ingreso de productos irregulares en nuestro país.
Explicó que la devaluación de la moneda argentina seduce bastante a los contrabandistas para poder traer mercaderías e ingresar de forma ilegal. “No tenemos de otra que fortalecer los controles, combatir la corrupción y al contrabando a la par”, aseveró.
Expuso que están trabajando muy de cerca con el Ministerio Público para poder castigar a aquellos funcionaros deshonestos que están en los puntos de controles y permiten o dejan permear el ingreso de productos de contrabando al país.
Expresó que la contaminación de funcionarios públicos se combate con la denuncia ante Ministerio Público por acción y la Fiscalía, para que al ser advertidos de una conducta irregular, estas personas sean aprehendidas y procesadas, así puedan pagar su responsabilidad ante la Justicia.
Manifestó que durante el cierre de fronteras paró bastante el contrabando y que con el fortalecimiento de los controles, la incorporación de tecnologías en algunos puntos estratégicos como km 9, el río Pilcomayo y el río Paraguay, ayudaron a mitigar el crimen en esos puntos.
“Nosotros vamos a trabajar arduamente para poder dar cierto alivio a los sectores productivos, ellos necesitan que seamos eficientes para que puedan vender sus productos y generar más empleo. Estamos con esa misión de seguir trabajando con todos los actores formales a los efectos de ser más eficientes al momento de combatir el contrabando”, garantizó.
Contó que los productos que más pretenden pasar los contrabandistas son los frutihortícolas, artículos de primera necesidad, alimentos perecederos, etc.
“Hay que señalar también que por algo el contrabando florece en nuestro país, hay un caldo de cultivo por parte de la sociedad que consume mucho productos de contrabando. Es fundamental fortalecer la otra pata, focalizar la materia de concientización y educación del ciudadano, señalando que no solamente afecta a la economía, a las empresas o a los productores, sino que también puede hacerlo a la salud de las familias, poniéndose en riesgo al consumir productos que han ingresado no respetando la cadena de frio que esos alimentos lo requieren”, indicó.
Señaló que cada gremio tiene su problemática y que son estructuras que han crecido con el correr de los años. “No hay que olvidar que tenemos más de 200 años de contrabando en nuestro país. Penosamente está aceptado el contrabando en todos los estratos.”, apuntó.
Finalizó afirmando que la ciudadanía tiene que evitar comprar productos de contrabando, por lo que apuesta a una campaña de concientización. “Ser conscientes de que este acto genera perjuicios para el productor nacional, industrial y formal y también puede dañar la salud de su familia comprando estos productos. Tienen que concienciarse estos extremos antes de comprar un producto de contrabando”, concluyó.
LOS NÚMEROS
Según el ministro, en números generales, en tres años y un poco más de gestión, la UIC ha incautado más de US$ 37 millones en mercaderías, casi 200 vehículos, 80 embarcaciones e innumerables allanamientos y procedimientos que se han efectuado.
“Los números son realmente récord sin precedentes en la República en materia de incautación de productos de contrabando”, avaló.
Foto: Diario la Mañana