Cuentan que un pequeño pueblo se fue formando alrededor de una capilla, hasta que en 1761, con la llegada de los Franciscanos al Paraguay, fue creciendo cada vez más hasta convertirse en el Pirayú que es hoy.
“Una ciudad muy tranquila, repleta de casas coloniales pintadas de colores llamativos y agradables, compuestas con galerías de pilares, rodeada de las bellezas naturales de varios cerros y serranías”, son las características de esta localidad, un lugar que merece la pena conocer y unos paisajes dignos de conocerlos.
¿Y qué mejor que hospedarse en un lugar tranquilo y privado que permita conocer las bondades de la ciudad? Ese es el concepto que ofrece la Quinta Pytu’u. “Creemos que hoy más que nunca las personas se merecen un descanso, con la tranquilidad de saber que no vas a estar en contacto con otros grupos de personas. Nuestro método de alquiler es de exclusividad para el grupo que alquile la Quinta”, dijo Manina Ferreira, su propietaria.
Agregó que el lugar está ubicado a menos de una hora de Asunción y a menos de 30 minutos de la ciudad de San Bernardino.
Cuenta con camas para 20 personas y todas las habitaciones climatizadas, piscina grande con cascada y piscina para niños, parrillas, cocina y comedor totalmente amoblados, tatakua, cancha de volley y mesas de billar.
En lo que respecta al precio, la quinta ofrece tres opciones para los visitantes. Para los grupos familiares que solo quieren quedarse un día, el costo es de G. 1.300.000; para los que quieren disfrutar del sitio los días sábado y domingo (por dos días) el precio es de G. 2 millones y aquellos que opten por ir viernes y retirarse el domingo el precio es del G. 2.800.000.
“Nosotros habíamos adquirido la propiedad para uso familiar, pero resultó ser tan grande que decidimos darle otro uso y por más de 10 años hemos estado recibiendo al público. Buscamos que el encuentro sea realmente placentero y familiar al estar entre tu núcleo solamente, sin contacto con personas ajenas”, señaló la propietaria.
Asimismo, resaltó que la privacidad es muy importante para ellos, de ahí el nombre de la Quinta, pues pytu’u viene de descanso, y en el lugar nadie molesta a los huéspedes, pueden estar a gusto, el lugar está amurallado, no se escuchan los ruidos del centro de la ciudad.
“Las personas se van muy satisfechas y repiten cada año. Además, la vista hacia la serranía es espectacular”, concluyó la propietaria.
LOS ATRACTIVOS DE PIRAYÚ
Según Ferreira, a Pirayú se le considera la meca del cine paraguayo, pues muchas películas fueron grabadas ahí, como “Libertad”, “Mangoré”, además los atractivos turísticos son incontables, pues está llena de historia.
La iglesia de Pirayú data de 1761, posee un retablo esculpido por manos guaraníes y trabajado con policromía, siendo una verdadera joya en madera por la cantidad de detalles, símbolo de un trabajo minucioso y netamente artesanal.
Otro atractivo imperdible es el antiguo Campamento Cerro León, que fue el lugar en donde el Mariscal López se encargó de juntar al menos 30.000 soldados y darles instrucción militar en dicho lugar, que en aquella época llegó a tener más de 40 pabellones construidos, de los que hoy solo quedan dos.
La famosa «Cascada Madama», ubicada en un arroyo a unos kilómetros del centro de la ciudad, es ideal para pasar un buen rato con familiares y amigos y desconectar del día a día. En ese lugar Madame Lynch solía ir a bañarse en sus aguas cuando visitaba al Mariscal López en Cerro León.
Finalmente, pero no menos importante, está la estación de tren que fue terminada de construir en 1864 durante la época de Don Carlos Antonio López y fue una vía principal de traslado de tropas y enseres de guerra durante la Triple Alianza, porque este punto ferroviario se comunicaba con la ya desaparecida Estación de Cerro León, terminada en el mismo año.
Los interesados en más información pueden contactar al (0981)356 665.