Los “parlasurianos” andan muy preocupados porque uno de ellos, de apellido Troche, se hizo dar la vacuna antiCOVID19 sin haber traspuesto la frontera de los 75 pirulos necesarios para alcanzar el estatus de vacunable. Ahora parece que el candidato a reemplazarlo también está enredado en irregularidades así que, según la noble cofradía de becarios de lujo, debería renunciar a asumir por dignidad.
¿Qué es un parlasuriano? Un parlasuriano es un becario de lujo -pagado por el contribuyente- a las paradisíacas playas de Pocitos, Carrasco y Malvín en Montevideo, sede de ese engendro llamado Parlasur, órgano legislativo del descangallado Mercosur. Hay 18. Cada uno de estos cuesta anualmente Gs. 422 millones. Todos, Gs. 7.600 millones, sólo en dietas. Además, reciben Gs. 4.500.000 por mes (Gs. 54 millones del año) en cupo de combustible, es decir, otros Gs. 972 millones por año. Y esto de los cupos de nafta es una garroneada que pinta de cuerpo entero a estos sujetos/as. Ninguno/a, que sepamos, viaja en auto a Montevideo para sesionar. Va en avión y allá, en todo caso, se moverá en remis, para lo cual tiene otro rubro, como también lo tienen para el hotel que hay que pagarle a razón, siendo discretos, de unos US$ 150 por noche. Como las sesiones son 10 al año, eso agrega alrededor de Gs. 470 millones al año en pasaje y hotel. Si agregamos otros US$ 500 en viáticos, tenemos otros Gs. 500 millones para completar la beca VIP de estos turistas rentados por el pueblo paraguayo.
¿Y para qué sirve un palasuriano? Cómo para qué, para presentar proyectos de declaración, ya que otra cosa no pueden hacer. Por ejemplo: proyecto Canese para declarar el 1° de marzo día de la autodeterminación de los pueblos del Mercosur. ¿Cómo hemos podido sobrevivir hasta ahora sin eso? Otro. Proyecto Genaro: Declarar de interés el día del Mercosur. Más: Declarar “de su interés” (¿será del interés de los parlasurianos?) el evento argentino “Hagamos lío, la revolución del amor” que se haría en Argentina. Y esta otra que sintetiza la banalidad del todo: “Aprobar proyecto que recomienda declarar el beneplácito por la celebración de los 25 años del Mercosur”. Una verdadera autocomplacencia, para no decir algo peor.
¿Hace falta seguir? Caro y al pedo, sin efecto práctico alguno sobre la marcha del país.
Y encima, vacunados VIP.
Una pinturita.
