Mansión de fondo, auto de “alta gama” y sobre él, exultante, un señor de jean, barbita y gorro con emblema. Se trata, al parecer, del jugador de futbol mejor pagado en la historia del futbol paraguayo. La cifra que consigna la información es verdaderamente importante, tanto, que casi podría decirse que debería figurar entre los potenciales 500 mayores contribuyentes de la Secretaría de Estado de Tributación.
Pero, ¡oh misterio! No está en sus planillas. Es cierto, se trata de una de las últimas incorporaciones y tal vez aún no haya cumplido con el rito de registrarse en la SET: IVA, renta y algún otro impuestillo de los tantos que deben rendir los contribuyentes que, de a pie y sin hacer alharaca de sus ingresos, deben pasar disciplinadamente por las oficinas impositivas. Los paraguayos hemos naturalizado el hecho de que, por tratarse de figuras del futbol, quedan exentas del pago de tributos. ¿Quién nos ha hecho creer eso?
Lo hemos abordado muchas veces tanto en 5Días como en El Independiente. No se trata de aguarle la fiesta a los famosos ni a escupirle en el asado a quienes han llegado, por méritos propios, a ocupar un lugar destacado en el mundo del deporte. Todo lo contrario. Abogamos porque ese éxito se profundice y que sean cada día más quienes entran a la galería de “los mejor pagados”. Muchas de esas figuras son ejemplos inspiradores para jóvenes que van en busca de la realización personal y de un lugar en el competitivo mundo del deporte profesional por esfuerzo propio. Pero es no los libera de una obligación que nace con cada ciudadano que llega a la mayoría de edad y que adquiere el estatus de ciudadano contribuyente.
De lo contrario entraría a la categoría de evasor y eso ya no es ejemplo para nadie, salvo para el cultivo de la inconducta ciudadana. Seguiremos insistiendo: la SET debe investigar la conducta tributaria de estos personajes entre quienes también están los directores técnicos, y sobre todo los “dueños de pases”, verdaderos magnates que amasan enormes fortunas sin que se sepa cuánto dejan al tesoro público paraguayo. Hasta ahora, el órgano tributario se mantiene en silencio y es incapaz de responder una simple pregunta:
¿Cuánto pagan de impuestos los mejor pagados del futbol?
