Soltando los últimos aspectos del invierno, hoy empieza la estación primaveral, marcada por distintos colores que decoran con tonos más alegres nuestro país. Tal vez por la inmensa connotación rejuvenecedora o por la analogía existente entre la primavera y el renacimiento de nuevas cosas, hoy también se celebra el Día de la Juventud.
De acuerdo a los últimos resultados de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC), publicada por la Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos (DGEEC), la población de 15 a 29 años de edad en el segundo trimestre del año 2020 fue de aproximadamente 1.931.000 personas.
Estas se dividieron de la siguiente manera: 942.000 hombres y 989.000 mujeres, lo que representa al 27% de la población total de Paraguay. Alrededor 1.255.000 jóvenes viven en áreas urbanas del país y cerca de 676.000 en áreas rurales, pero, ¿cuál es la realidad que atraviesa este sector de la población hoy en día?
CIFRAS ALARMANTES
“Cuando hablamos de juventud, tenemos que hablar de diferentes grupos, que se dividen en áreas urbanas, rurales, barrios más vulnerables o zonas más favorecidas. Por ello resulta complicado hablar de los jóvenes en conjunto, pues cada uno presenta diversas dificultades”, señaló Mirtha Rivarola, oficial de Género, Adolescencia y Juventud del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
En este sentido, la representante mencionó que existen índices preocupantes en torno a la realidad de la juventud paraguaya. Por ejemplo, más de un millón de jóvenes se encuentran fuera del sistema educativo y los porcentajes de aquellos que acceden al sector terciario son muy reducidos.
“La deserción escolar empieza a partir de los 14 años y vemos que 6 de cada 10 jóvenes no concluyen la educación secundaria y de 10 solo 2 pueden dedicarse exclusivamente a estudiar, mientras que el resto debe equilibrar sus estudios con el trabajo”, analizó la especialista.
En cuanto a la situación actual vivida, Rivarola dijo que la pandemia dejó entrever que solo 6 de cada 10 jóvenes cuenta con acceso a Internet y 3 de cada 10 ocupados laboralmente son jóvenes.
Prosiguió también diciendo que el desempleo de personas mayores de los 30 años va entre el 4% y 5%, mientras que el desempleo de los jóvenes alcanza el 9% y, de esta cifra, 3 de cada 4 se encuentra en un trabajo informal, por lo cual no tendrán jubilación y no cuentan con una protección social.
“Se habla mucho de que somos un país joven y la juventud representa el futuro de la nación, pero, ¿cómo se refleja realmente este compromiso y esa poesía a la hora de hablar de los jóvenes? Solo a través del presupuesto y el nivel de inversión en este sector de la población”, aseguró Rivarola.
¿QUÉ HACEN LAS AUTORIDADES?
De acuerdo a la ministra de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS), la reforma educativa es vital para ofrecer una mejor realidad a los jóvenes del país y, a la par, se debe fortalecer el sistema de capacitación para el trabajo para los mismos.
“Esta capacitación reconvierte a trabajadores o posibilita mayores herramientas de trabajo, que complementan la educación formal y por ello, desde el Ministerio, sacamos un programa para que quienes terminan su carrera universitaria, sigan formándose idiomática y tecnológicamente”, destacó Bacigalupo.
La ministra concluyó diciendo que, si sigue esta labor constante para los jóvenes, se vislumbrarán mejores ofertas y fuentes de trabajo para este sector de la población. No obstante, algo es muy claro: en su día, la juventud paraguaya no cuenta más que con el ideal de representar el futuro del país, mientras están desplazados y rezagados en diversos estamentos sociales.
Fuente de foto: US Embassy in Paraguay.
