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El coste total de la campaña electoral en Estados Unidos alcanzará un nivel récord de US$ 14,000 millones, lo que la convierte en la más costosa de la historia, según los cálculos de la organización Center for Responsive Politics, que hace seguimiento a las donaciones y gastos políticos.
La nueva cifra eleva sustancialmente las estimaciones previas de la organización de US$ 11,000 millones, debido al influjo de donaciones en los últimos meses de campaña, especialmente por la polarización que ha provocado la confirmación de la jueza conservadora del Tribunal Supremo Amy Coney Barrett, contraviniendo la tradición de no abordar este proceso durante la época electoral.
“Hace diez años, hablar de un candidato presidencial con mil millones de dólares era algo difícil de imaginar. Este año probablemente veremos dos”, indicó la directora ejecutiva de Center for Responsive Politics, Sheila Krumholz.
El nuevo monto, equivalente a una quinta parte de todo el presupuesto del Departamento de Educación deEstados Unidos, supera con creces los alrededor US$ 6,600 millones gastados en la campaña electoral del 2016, en la que se enfrentaron el republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton.
La polarización política este año ha servido para atraer más fondos. En el lado demócrata, con la candidatura de Joe Biden, los donantes han aportado dinero en niveles récords por la animadversión contra Trump, tras casi cuatro años de presidencia del republicano.
De hecho, el bando demócrata ha gastado ya casi US$ 7,000 millones, mientras que los republicanos han empleado US$ 3,800 millones.
Los Super PAC, que permiten recaudar más fondos que los partidos y de manera anónima, y que en teoría se gestionan sin influencia de los partidos, han recaudado solo en el mes de octubre US$ 1,200 millones.
La mayoría de estos comités de acción política trabajan para que Biden, el favorito de las encuestas, se imponga a Trump.
Además de la carrera por la Presidencia, algunas elecciones al Senado y a la Cámara de Representantes, que también se renuevan el 3 de noviembre, han atraído un alto nivel de fondos al ser muy competitivas y ser estratégicas para que los demócratas tomen el control del Senado, que dominan los republicanos.