Por Pablo Magee, periodista y escritor francés
Paraíso fiscal al servicio de George Soros y los Príncipes Habsburgos, locura de un individuo desesperado por atención, obscuro sistema ultracorrupto de criptomoneda, plataforma de lavado de dinero, proyecto frívolo contando con el apoyo de países ilegítimos como Sealand: la República Libre de Liberland es fuente de las especulaciones más increíbles y otras teorías del complot que parecieran salidas directo de una película de James Bond. Por eso hoy, 13 de abril del 2021, fiesta nacional de esta micronación, El Independiente aprovecha la oportunidad para buscar la realidad y aclarar el tema para sus lectores, no solo investigando, sino también entrevistando al propio presidente de Liberland.
Génesis
Un día como hoy, el 13 de abril del 2015. En un bosque perdido de la isla de Gornja Siga (45° 46’N, 18° 52’E) bordeando el rio Danubio, entre Serbia y Croacia, un joven político checo de 32 años llamado Vít Jedlicka acompañado por su esposa y sus amigos mas cercanos, iza una bandera nueva, cantando un himno desconocido del mundo entero con la excepción de los personajes presentes. Unos días después, los gobiernos de Serbia y Croacia reciben una carta diplomática de parte de Jedlicka y sus acólitos cuyo contenido se puede resumir así: “Siendo el territorio de Gornja Siga una terra nullius (tierra de nadie), proclamamos la propiedad de esa tierra, la cual, desde hoy, será conocida como la República Libre de Liberland”. Respuestas inmediatas: Serbia no invoca la propiedad de dicha tierra de aproximadamente 7,2 kilómetros cuadrados, pero tampoco reconoce la existencia de Liberland. De su lado, Croacia considera que el territorio pertenece a Serbia y prohíbe el acceso al territorio liberlandiense a los autoproclamados ciudadanos de Liberland, guardando la nueva frontera con policía y militares. Sin embargo, el hecho de que cada uno de los dos países haya considerado de forma oficial con su carta de respuesta que el territorio de Liberland no les pertenece, confirma de facto que el concepto de terra nullius es aplicable a dicho territorio. Para el no tan frívolo Vít Jedlicka, presidente (también autoproclamado) de Liberland, la batalla diplomática puede empezar.
Liberland y la Convención de Montevideo
Desde un principio, el Presidente de la República Libre de Liberland planteó su proyecto como un emprendimiento serio, compartiendo su objetivo de cumplir con los requerimientos de la Convención de Montevideo. Firmada por 19 países en el año 1933 en Montevideo, Uruguay, dicha Convención establece los principios de lo que constituye un estado independiente. En su primer artículo, la convención enuncia los 4 requerimientos fundamentales para la formación de un Estado. 1: una población permanente. 2: un territorio determinado. 3: un gobierno. 4: la capacidad de entrar en relaciones con los demás estados. Vale la pena destacar que, al día de hoy, Liberland cumple efectivamente con estos cuatro requerimientos. Pero más importantemente para Liberland en su estado actual de desarrollo: la primera frase del Artículo 3 de la Convención establece que “La existencia política del Estado es independiente de su reconocimiento por los demás Estados.”
Esta frase da pie a la iniciativa de Jedlicka de formar un estado todavía no reconocido a nivel internacional. En paralelo al cumplimiento de la Convención, Liberland desarrolló rápidamente sus símbolos nacionales. Así, la bandera de fondo amarillo, representando el libertarismo, cruzado por una raya negra horizontal, la cual representa menos intervencionismo del gobierno y la rebelión. El escudo del país aparece en el centro de la bandera: se compone de un pájaro que representa la libertad, un árbol que representa la prosperidad, un río azul que es el Danubio, y el sol que representa la felicidad. Liberland también tiene un himno: Marcha de victoria hacia la tierra de Gloria, compuesto por el famosísimo jefe de orquesta checo Varhan Orchestrovič Bauer.
¿Qué sistema constitucional rige al nuevo país?
Con sus XVIII artículos escritos en inglés (idioma oficial del país), la constitución de Liberland es muy parecida a la Constitución de Suiza, la cual tiene la forma de una democracia participativa directa. Es decir que todas las leyes están sujetadas a la aprobación popular. Aunque Liberland se inspire abiertamente de micro países como Liechtenstein o Mónaco, su constitución hace de Liberland una república constitucional con elementos de democracia directa sometida a la voluntad popular.
De forma práctica, cuando el gabinete del presidente propone una ley, dicha ley es transmitida a la asamblea la cual vota a favor o a contra. Si la ley obtiene una mayoría de votos, se transmite a la Corte Suprema para averiguar su constitucionalidad. La belleza del proceso está en el siguiente paso: los ciudadanos tienen la posibilidad de vetar dicha ley antes de su adopción final. ¡Pero ojo! Los ciudadanos que votan son los que pagan impuestos, ya que el impuesto es opcional en Liberland. Por ahora, el presidente sigue siendo el fundador del país, quien define el sistema actual como provisorio, hasta que este operacional la estructura de gobierno definida por la constitución.
Hablemos de urbanismo
En sus seis años de existencia, Liberland organizó dos concursos de arquitectura, de los cuales participaron mega estrellas de la arquitectura a nivel mundial como Stanley Lung o Patrik Schumacher de Zaha Adid Architects en Londres. El último concurso tuvo lugar en el año 2020 y es interesante destacar los pedidos de la micronación: “A nivel funcional, Liberland no tiene zonas de regulación o restricciones municipales. No tiene ninguna cultura visual preestablecida. El campo esta totalmente abierto para la innovación en cada nivel. La nueva arquitectura de Liberland será vital para su supervivencia, éxito, y avance hacia sus aspiraciones. Más que fantasías artísticas, Liberland busca propuestas radicalmente creativas y maduras, para una nación de alta densidad, contando con un desarrollo lúcido hacia una ciudad totalmente funcional, sofisticada arquitecturalmente e inteligente.” Así, aunque la construcción física de Liberland no aparezca en el calendario oficial por cuestiones diplomáticas, el gobierno del país está listo para la edificación de su capital apenas se den las condiciones.
Una ciudadanía abierta a -casi- todos
El ideal de Jedlicka fue fundar un país en el cual los ciudadanos honestos pueden prosperar, sin leyes, reglas, impuestos y políticas de estado ineficientes: una utopía empujada adelante por soñadores políticos en búsqueda de un mundo mejor. La población de Liberland es un grupo único de personas que comparten ciertas creencias. 1: el respeto de los derechos ajenos, sin consideración de raza, etnia, orientación o religión. 2: el respeto de la propiedad privada, la cual es intocable. 3: la creencia en una sociedad libre y abierta, rechazando cualquier forma de totalitarismo. 4: el rechazo a la violencia. Bajo semejantes condiciones, no hace falta ser mago para imaginar la popularidad de la nacionalidad liberlandiense. De hecho, el proceso de obtención de la ciudadanía de Liberland es muy distinto a cualquier otro país del mundo. La ciudadanía es abierta a todos y se pide online. Los únicos que no pueden pretender obtener la nacionalidad del país son los comunistas, los neonazis y los miembros de partidos políticos extremistas. Al final de junio del 2015, un mes después de la apertura del portal de Liberland liberland.org en la red, se contaban unos 300.000 pedidos de nacionalidad. En marzo del 2021, este número supera los 650.000, haciendo del pueblo de Liberland el pueblo viviendo en diáspora más importante del mundo, siguiendo los pasos del pueblo judío antes de la creación de Israel.
Liberland en el Mundo
Hoy en día, Liberland cuenta con mas de 100 representantes consulares en el mundo, con oficinas en Santiago de Chile, Montevideo, Buenos Aires y Asunción del Paraguay para América latina. Esta red mundial de intelectuales busca el reconocimiento oficial de los países en los cuales están instalados. Liberland cuenta también con el reconocimiento de varios partidos políticos liberales de la oposición en Canadá, España, Noruega, República Checa, Suiza, Turquía (donde existe un sello con la efigie del presidente Vít Jedlicka) y los Estados Unidos. Además, durante la presidencia de Donald Trump, el Gobierno de Liberland estuvo en contacto con el gobierno de Estados Unidos contemplando un posible reconocimiento del país por los EE. UU. Al mismo tiempo, la ONU empezó a interesarse por Liberland de forma más seria, invitando a su presidente a varias reuniones.
País del Futuro
La filosofía política y económica de Liberland se basa en el liberalismo clásico, o sea, la garantía de los derechos individuales fundamentales como la libertad de expresión, de asociación, libertad de religión y de propiedad, etc. El lema del país es el reflejo de esta filosofía: “Vivir y dejar vivir”. Es decir, minimizar el intervencionismo del gobierno para dejar más libertad a los ciudadanos: un sueño hecho realidad para los miles de ciudadanos en todo el mundo, cansados de las reglas, las leyes, los impuestos, pero también de la corrupción de su país de origen. Económicamente hablando, el gobierno y el pueblo de Liberland se mueven con el Mérito: una criptomoneda creada con el apoyo de la empresa Bitnation, especializada en la creación de monedas digitales, y SafeX, especializada en seguridad numérica. De hecho, el sistema económico numérico de Liberland es probablemente entre los más avanzados del mundo, lo cual es una consecuencia directa del inconveniente de no poder reunirse físicamente en un parlamento que todavía no existe. Muchas veces, los observadores de la web se refieren a Liberland como “a blockchain-powered government”: un gobierno funcionando con blockchain. Para los que todavía no entraron al siglo XXI, un blockchain es un registro numérico ultra sofisticado de todos los intercambios y transacciones que se hicieron en una plataforma. En este caso: la plataforma de Liberland. Puesto de forma simple, Liberland es un gobierno que funciona integralmente de forma numérica, en una plataforma inviolable protegida por los guardias de SafeX. Todo, desde las reuniones de ministros hasta los emails entre los representantes, las órdenes del presidente y las transacciones de la criptomoneda Mérito, se desarrolla de forma numérica con el sistema blockchain que asegura que nada esté perdido en la galaxia web y más importantemente: una transparencia total. Esta forma de gobernar “a distancia” representa una inspiración para varios países, más todavía durante la crisis actual de Coronavirus que prohíbe interacciones presenciales.
Conclusión
Lejos de las teorías extravagantes que uno lee en la web, descubrimos una comunidad mundial de más de seis cientos mil personas -artistas, millonarios, arquitectos, músicos, príncipes, soñadores, políticos, economistas, abogados, politólogos- altamente organizada, siguiendo un sueño: el de encabezar la experiencia social única a nivel mundial de crear desde cero un país libre en un espacio geográfico “conquistado” de forma pacífica, con el poder de la ley.
¿Al final, por qué será que esta iniciativa es tan molestosa para la comunidad internacional o el público que la critica con acusaciones tan agresivas? En este mundo tan organizado, puede ser que la idea de concretar un sueño de libertad aparezca intolerable por poblaciones humanas cada vez más formateadas para aceptar un orden establecido que no tolera semejantes visiones e iniciativas, lo cual es el reflejo doloroso de la poca libertad de pensamiento que queda efectivamente al individuo en el pueblo mundial del planeta Tierra.
“En algún momento, me di cuenta de que parecía más fácil crear un país nuevo que cambiar un país existente.”
ENTREVISTA
Buen día Señor Presidente. ¿Cómo esta y cómo está Liberland?
Mi familia y yo estamos bien, gracias; y Liberland está fenomenal. Acabamos de volver de una gira por América Central para apoyar a nuestros representantes y pueblos liberlandienses en cada país. Al final, pasamos por Guatemala y Panamá, donde visitamos dos proyectos de desarrollo: un pueblo de diáspora liberlandiense y un pueblo que es también una empresa emergente. Ahora estamos en Liberland para celebrar el aniversario de la creación de nuestro país, hoy, el 13 de abril, cumpleaños de Thomas Jefferson.
Para empezar, hablemos de la génesis de Liberland. ¿Cómo surgió esta idea?
Cuando tenía 13 años, leí un libro de Frédéric Bastiat – La ley-, que cambió mi vida. El libro empezaba así: “La ley, digo, no solo se alejó de su propósito, ¡si no que fue manipulada para seguir un propósito contrario! La ley se convierte en el arma de cualquier forma de codicia. En vez de contrarrestar el crimen, la ley misma es culpable de los crímenes que tiene que disminuir.
El objetivo del nuevo estado es construir un país libre donde la gente honesta pueda prosperar sin estar sometida a la opresión del gobierno. Estamos construyendo un país que puede servir de ejemplo para otros países.
Lo mejor es que, en Liberland, los impuestos se pagan de forma voluntaria y la gente es recompensada cuando los paga. Fundamos Liberland el 13 de abril del 2015 para celebrar el cumpleaños de Thomas Jefferson. Quisimos invocar el espíritu de la Revolución americana. También quisimos combinar los mejores elementos de la República norteamericana, la democracia suiza y la meritocracia de Singapur. El país funciona con el sistema de blockchain para que el gobierno sea moderno y transparente.
Sabe Usted cuántos ciudadanos de Liberland hay en este momento, ¿y cuántas personas pidieron la nacionalidad?
Mas de 650 000 personas pidieron la nacionalidad de Liberland. Ahora mismo tenemos 1000 ciudadanos y cerca de 3000 e-residentes. Pedir la nacionalidad es un proceso fácil, pero los que solicitan la nacionalidad tienen que volverse activamente comprometidos en el siguiente paso. Tenemos un sistema de Méritos que la gente puede adquirir a través de sus actividades o contribuciones económicas.
¿Cuál es el estado del reconocimiento de Liberland por otros países? ¿Y la ONU?
Tenemos una representación fuerte en mas de 100 países del Mundo. Todos están haciendo los pasos necesarios para el reconocimiento de Liberland. El año pasado, obtuvimos el primer reconocimiento oficial de un país miembro de la ONU. Estamos también a punto de obtener el reconocimiento de un país de América Central. No quiero publicar los nombres todavía, pero el tema de nuestro reconocimiento internacional esta avanzando de forma muy positiva.
Mucho se escribió de la criptomoneda de Liberland. ¿En qué etapa está el proceso?
Liberland usó el Bitcoin para su reserva nacional y su moneda desde el primer día. Fuimos el primer país en invertir masivamente en Bitcoin. Sabíamos desde un principio que el futuro del sistema económico mundial era mucho mejor que cualquier cosa que venga de un banco central. Pero también creamos nuestra propia criptomoneda, el Mérito, que vamos a usar en nuestro sistema de gobierno.
Liberland parece tener un costo de funcionamiento muy alto. Entre el gobierno, el blockchain, los salarios de funcionarios, sus propios viajes oficiales. ¿Cuál es la fuente de la economía liberlandiense, ahora y en el futuro?
Los impuestos en Liberland son y serán voluntarios. Lo cual no quiere decir que la gente no los pague. Tenemos la bendición de contar con un apoyo económico fuerte desde la creación de Liberland y también contamos con la bendición de la subida constante del valor de las criptomonedas en nuestro presupuesto estatal.
¿Qué responde a la gente que dice que el propósito de Liberland es crear un paraíso fiscal?
Crear infiernos fiscales no es nuestro negocio. Dejamos esto a otros estados. Y nuestra ambición es volvernos un paraíso no solo fiscal, pero también en otros aspectos de la vida. Déjame citar Mark Skousen: “El impuesto es el precio que pagamos por fallar en construir una sociedad civilizada. Más alto el impuesto, mas grande la falla. Un estado totalitario planeado desde su centro representa la falla más importante del mundo civilizado, mientras una sociedad voluntaria representa su éxito último.” Considerado esto, en algún momento, me di cuenta de que parecía mas fácil crear un país nuevo que cambiar un país existente.
Paraguay fue el primer país en reconocer Israel. ¿Eso le da esperanza de que el estado paraguayo sea más abierto en reconocer Liberland?
Creo que hay muchas oportunidades de apoyo mutuo entre nuestros dos países. Estoy muy positivo con nuestras relaciones.
¿Era importante para Usted contar con un representante (Cónsul Honorario Pablo Magee) en Paraguay?
Pablo esta haciendo un trabajo tremendo para promover nuestros valores nacionales en Paraguay. Espero visitarle pronto para apoyarle a él, y a nuestra diáspora en Paraguay.
¿Piensa que Paraguay y Liberland podrían apoyarse mutuamente?
Sin lugar a duda. Liberland se está volviendo un lugar importante de negocio en Europa, y nuestra zona franca sería un punto de entrada ideal en Europa para muchos productos. Del otro lado, tenemos mucho que ofrecer en los temas de nuevo gobierno y sistema monetario.
¿Tiene planes de visitar Paraguay en el futuro?
¡Estaré muy feliz de visitar Paraguay si me invitan! Creo que será pronto ya que nuestras relaciones con países de América Central y América latina se están desarrollando de forma muy positiva.
Gracias Señor Presidente. Y… ¡Que viva Liberland!
¡Viva!
