Jorge Martínez, propietario de Charles The Bar, manifestó que la respuesta de la ciudadanía en estos primeros 20 días de reapertura de locales luego de la cuarentena total ha sido positiva e instó a la población a no tener miedo de ir a los locales.
El empresario aseguró que adentro se siguen estrictamente los protocolos sanitarios. “Este rubro siente mucho respeto por el Covid-19, pero no miedo, porque el miedo paraliza y si nos paralizamos no podríamos trabajar y si no trabajamos mucha gente quedaría sin empleo y la economía caería más a pique aún”, expresó Martínez.
En ese sentido, afirmó que solo cuenta con el apoyo de los clientes ya que recordó que el apoyo del Gobierno Nacional ha sido prácticamente nulo para este sector. “Vale mencionar que somos conscientes de que no contamos con la ayuda del Gobierno y ya no la esperamos, pero sí debemos llamar a la conciencia de proveedores (alquileres, bancos, casa de electrodomésticos, etc.) a darnos tiempo para ir regularizando nuestra situación”, exhortó.
El propietario agradeció a los clientes que asisten a los bares dando su muestra de crédito y confianza hacia los locales. También agradeció por entender los cuidados y protocolos como también los horarios. De esta manera admitió que a veces son inoportunos y hasta molestos pero aseguró que son acordes a las circunstancias actuales.
También recordó que desde el retorno no ha saltado un solo caso positivo dentro de los locales. Por otra parte, invitó a la ciudadanía a realizar sus encuentros sociales y festejos, con el mismo núcleo familiar, laboral o de relacionamiento habitual en los locales, “en donde encontrarán más controles que hasta en sus propias casas”.
Finalmente, manifestó que “de esta salimos todos juntos, con sacrificio, trabajo, humildad, respeto y compañerismo, sin mirar al costado o al que hace las cosas mal. Este rubro sabe de esto y es así que esperamos compartir esta nueva normalidad”.
PROTOCOLO SANITARIO
Los clientes deben respetar el distanciamiento de dos metros entre mesa y mesa, además de la separación de un metro entre personas.
También, todo el personal del restaurante deberá utilizar tapabocas y se deberá cumplir con el lavado de manos.
Igualmente, los locatarios deben proveer a los clientes de alcohol en cada mesa y los menús deben ser lavables o descartables. Otra de las condiciones impuestas por Salud es que las personas sean de un mismo núcleo familiar o de amigos. Se permite grupos de hasta seis personas.