El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, señaló que la reforma del sistema penitenciario se trata de un proceso y que lo que se mejora allí repercute en la seguridad nacional.
Destacó que esta visión, implementada desde el Consejo de Defensa Nacional (Codena), es compartida a nivel regional a través de la cooperación, especialmente con Brasil. «Un Estado no puede ser más débil que una organización criminal, un Estado unido en alianza con los países vecinos tiene que rendir y surtir un efecto», dijo en entrevista con Ñanduti TV.
En los últimos meses, el Gobierno emprendió importantes operativos para retomar el control de las penitenciarías, el más importante de ellos fue Veneratio, que permitió a las fuerzas de seguridad, luego de mucho, ingresar por completo a la penitenciaría Tacumbú.
«Hoy día uno puede recorrer la penitenciaría, no se ven más todas esas personas en colchones agolpadas bajo el tinglado. Hoy eso no existe más. Y sobre todo la seguridad, uno puede ir con uno o dos agentes a recorrer todo el centro penitenciario. Los reclusos ya no manejan ninguno de los portones», dijo sobre los resultados del operativo.
Señaló que este es un trabajo a mantener día a día y forma parte de la propuesta de reforma del sistema penitenciario. Con la construcción de nuevas cárceles, se cuenta por primera vez con pabellones de máxima seguridad y la posibilidad de separar a personas condenadas para programas de reinserción.
La separación se da de acuerdo a perfiles criminológicos, en donde se incluye el tipo de condena y comportamiento dentro de las penitenciarías para los programas de reinserción. «Las nuevas cárceles están divididas en 8 módulos, que son como subpenitenciarías independientes, esto nos permite tener lugares acordes de esparcimiento, talleres de reinserción y capacitación», dijo el ministro.
Otros operativos
Si bien Veneratio fue el más destacado, días después se desarrolló igual de importante y que requirió una elevada coordinación. Para el operativo Joapy se ingresaron al corazón de penitenciarías en otros puntos del país para extraer a criminales de alta peligrosidad y vinculados al crimen organizado de Brasil, para su extradición y que cumplan condena en el vecino país.
Más reciente fue el operativo contra una red de estafa a través de llamadas extorsivas que operaba desde la penitenciaría de San Pedro. Esta red de extorsión es sindicada como responsables de más de G. 1.500 millones en robos a través de billeteras electrónicas.
Fuente: Agencia IP
