En junio del 2019 se iniciaron las obras para la construcción de un megacomplejo, con hotel 5 estrellas, centro de convenciones, parque de diversiones, centro comercial, y casino incluido en la Isla San Francisco, ubicado en el río Paraguay, en la zona de la ciudad de Limpio. La gran obra tenía una inversión inicial de aproximadamente US$ 150 millones, y que es impulsado por el grupo Vimérica Development.
Ahora se volvió noticia de nuevo este emprendimiento ya que la Unidad Especializada en Delitos Ambientales del Ministerio Público presentó imputación el pasado 5 de noviembre contra varios empresarios por violación de normas ambientales.
Según el acta de imputación, la agente fiscal Lisa Martínez Amarilla abrió un proceso contra el boliviano Rodrigo Iturralde Costa (44), quien es representante legal de la firma Vimérica SA, y contra Paul Norman Hellmers Dos Santos, de la empresa Signature SRL.
El proceso se basa en el artículo 5 inciso E de la Ley 716/96. La norma señala que serán sancionados con penitenciaría de uno a cinco años y multa de 500 a 1.500 jornales mínimos legales para actividades diversas no especificadas como los que eludan las obligaciones legales referentes a medidas de mitigación de impacto ambiental o ejecuten deficientemente las mismas.
LOS HECHOS
Los técnicos de la Dirección de Delitos Ambientales del Ministerio Público constataron que la extracción de arena para las obras se estaba realizando en un islote o bando de arena, que poseía su propio ecosistema de formación vegetal y un hábitat de fauna nativa, principalmente de aves.
Tras esta verificación se realizó un análisis técnico comparativo del estudio de Impacto Ambiental, Plan de Gestión Ambiental y Declaración de Impacto Ambiental presentada por Vimérica SA, y se concluyó que el lugar donde la empresa Signature se encontraba realizando la extracción de arena se encuentra fuera del área de préstamo establecida en dicho estudio. Esto se verificó el 30 de agosto, el 24 de octubre y el 19 de noviembre del 2019.
Para la Fiscalía esos trabajos no estaban autorizados por el Ministerio del Ambiente (Mades), y según informes fiscales, estos trabajos provocaron un daño al mencionado ecosistema que servía para el descanso de aves migratorias, pues partieron en dos el islote.
En agosto pasado, la institución a cargo del ministro Ariel Oviedo, avaló la explotación de la isla San Francisco, y archivó el sumario que se abrió por el impacto ambiental provocado por las empresas a cargo del proyecto hotelero y turístico.
REPERCUSIONES
La semana antepasada se analizó la denuncia de impacto ambiental en la Cámara de Senadores. Fue durante la reunión de los congresistas que forman parte de la Comisión de Nacional de Defensa de los Recursos Naturales (Conaderna).
Fue el senador Enrique Salyn Buzarquis, quien como vicepresidente de Conaderna, convocó a la reunión intersectorial, que se realizó de manera virtual, para tratar la situación de la isla San Francisco.
La Comisión informó que estaban abocados a recabar toda la información relativa al proyecto hotelero y turístico y su impacto social y ambiental.