La Embajada de Italia en Paraguay con apoyo de la Municipalidad de Asunción, llevará a cabo una ceremonia conmemorativa del 77º Aniversario de la Fiesta de la República Italiana, el próximo viernes, 2 de junio, a las 10:00 horas, en la Plaza Italia (15 de Agosto y Ygatimi).
La iniciativa prevé la entonación de los Himnos Nacionales ejecutados por el Quinteto de Cuerdas de la Orquesta de Cámara Municipal de Asunción con el acompañamiento de alumnos y profesores del Instituto Municipal de Arte, entre otras canciones italianas y las palabras del Embajador de Italia en Paraguay, Marcello Fondi, entre otras autoridades.
El 2 de junio, se celebra en Italia la Fiesta Nacional, y se conmemora el referéndum constitucional de 1946, cuando (por sufragio universal) los ciudadanos italianos fueron llamados a decidir qué forma de Estado (monarquía o república) querían para su país tras la Segunda Guerra Mundial y la caída del Fascismo.
ACERCA DE LAS OBRAS
GIOACCHINO ROSSINI (1792 – 1868)
Uno de los mayores creadores en el mundo de la ópera italiana, con más de 39 obras líricas, aparte de valiosos aportes en el campo de la música sacra y de cámara. Entre sus grandes éxitos se encuentran: Guillermo Tell, La Gazza Ladra, Semiramide, La Italiana en Argelia, El barbero de Sevilla y muchas más. Llamado el “Mozart italiano” su obra forma parte de la transición del estilo clásico a las nuevas corrientes del romanticismo. La obertura de Guillermo Tell se constituye en una obra sinfónica premonitoria de los futuros poemas sinfónicos y a la vez en una suerte de resumen de momentos claves de la ópera.
PIETRO MASCAGNI (1863 – 1945)
Se formó en Milán a partir de 1882, siendo compañero de estudios de Puccini. Como compositor formó parte de la línea llamada verista en la que escritores y guionistas, hacia finales del siglo XIX introducían en sus obras historias de la vida real y de la crónica policial. Es autor de 17 óperas de entre las cuales ingresó al repertorio de la lírica mundial, solamente Cavalleria Rusticana, estrenada en Roma en 1890. Su famoso Intermezzo, en forma individual, forma parte del gran círculo de las llamadas melodías inmortales.
GIUSEPPE VERDI (1813 –1901)
La escuela operística italiana del siglo XIX llega a su máxima expresión con Giuseppe Verdi. A su notable riqueza melódica y habilidad en el empleo de todos los recursos vocales sumó –progresivamente, a medida que su genio evolucionaba hacia una madurez plena- una armonía y una orquestación más ricas, una concepción dramática y un sentido poético más elevados, cada vez con mayor dignidad y verdad.
Se formó con un maestro particular de su pueblo y recién a los veintiséis años de edad estrenó su primera ópera, Oberto, en 1839, en la Scala de Milán. A partir de entonces consagró su vida al género operístico, continuaron así títulos como: Ernani, Macbeth y Luisa Miller. Con las óperas Rigoletto (1851), Trovatore (1852) y Traviata (1853) alcanzó una popularidad que no tiene precedente en la historia de la música. Más adelante compuso: Don Carlos, Vísperas sicilianas, Simone Boccanegra, Baile de Máscaras, La Forza del Destino, culminando con Aída, estrenada en 1871 a petición del virrey de Egipto, con motivo de la solemne inauguración del canal de Suez.