El Consejo Nacional de Voluntariado (CONAVO) se encuentra organizando por primera vez la conmemoración del “Día Nacional del Voluntariado y el Día Internacional del Voluntariado”, con el objetivo de visibilizar las acciones de las organizaciones de voluntariado de Paraguay.
Durante mucho tiempo en el Paraguay fueron los voluntarios los que construyeron las rutas, puentes, escuelas, puestos de salud, comisarías, clubes deportivos, iglesias, etc.
En la pandemia que venimos soportando, hablar y valorar el trabajo voluntario en Paraguay es oportuno, donde se han activado de forma espontánea miles de acciones de voluntarios que van desde la organización de polladas para ayudar a solventar los gastos de salud, ollas populares para la provisión de alimentos en comunidades vulnerables, la provisión de almuerzos a acompañantes de pacientes en hospitales públicos, los esfuerzos para contener a la población en sus hogares, la difusión de información responsable y de fuente segura en redes sociales, las actividades lúdicas para niños y adolescentes utilizando medios tecnológicos que buscan mejorar la salud mental, etc.
Son solo algunos ejemplos de las acciones que durante los 365 días han realizado las organizaciones de voluntarios aportando su tiempo y sus recursos para paliar la situación de necesidad de los sectores más vulnerables del país.
La Ley 6060/18 “Que regula el voluntariado”, en su Artículo 22. Del Reconocimiento. Establecer en homenaje a la acción voluntaria “El Día Nacional del Voluntariado”,
que será el 5 de diciembre de cada año, coincidentemente con lo establecido por las Naciones Unidas.
EL HOMENAJE
Según datos de la ONU, cada 5 de diciembre se celebra el Día Internacional de los Voluntarios. Este día supone una oportunidad única para agradecer todos los esfuerzos realizados por los voluntarios y sus organizaciones, así como promover sus valores y dar a conocer los logros que consiguen en sus comunidades, ya sea a través de organizaciones no gubernamentales (ONGs), agencias de las Naciones Unidas, organismos gubernamentales o el sector privado. Especial mención merece el Programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), que no sólo moviliza a miles de voluntarios cada año, sino que contribuye a la paz y al desarrollo a través de la defensa y reconocimiento de los voluntarios mediante la creación de alianzas con asociaciones para incluir a estos desinteresados colaboradores en los programas de desarrollo. Cada día miles de personas se ofrecen como voluntarios, sobre el terreno o en línea, para contribuir a la paz y el desarrollo sostenible.
Permite a las personas y comunidades participar en su propio crecimiento. Gracias al voluntariado, los ciudadanos construyen su propia resiliencia, amplían su conocimiento básico y adquieren un sentido de la responsabilidad para sus propias comunidades. El voluntariado consolida la cohesión social y la confianza al promover acciones individuales y colectivas, lo que conlleva efectos sostenibles para las personas mediante las personas.
Además, el voluntariado tiene un importante efecto dominó. Inspira a otras personas e impulsa las transformaciones requeridas para que puedan alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, entre ellos el número 16 dedicado a promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas, y que estos arraiguen en las comunidades.
Los voluntarios pueden proporcionar asistencia técnica y completar las capacidades en todas las áreas de metas temáticas. Proporcionan servicios básicos, ayudan a transferir capacidades y a fomentar intercambios de buenas prácticas, y añaden una valiosa experiencia internacional y local gracias a los intercambios nacionales, Sur-Sur, Sur-Norte y Norte-Sur. Los voluntarios corporativos pueden desempeñar un papel especial a este respecto, al poner su experiencia tanto a disposición de las instituciones públicas como de las comunidades frágiles.