La decisión tomada por la Junta de Gobierno de la Asociación Nacional Republicana (ANR) – Partido Colorado de convocar a una Convención Colorada para este sábado sigue firme, sin embargo, para convencionales no existen garantías que se respeten debidamente el proceso y los votos, además podría ser ilegítimo.
En este punto, el convencional Alejandro Sasha Evreinoff indicó que están pretendiendo violar los derechos de los 2.400.000 colorados de elegir autoridades y ser electos como autoridades partidarias con la medida de la prórroga de mandato que se quiere instalar, además que no hay garantías para caer en un autoritarismo partidario.
“Qué garantías tenemos que en el 2022 nos vuelvan a pedir esto (prorrogar el mandado) y ahí sí ya va a ser una dictadura, hoy es un autoritarismo, (nos dicen) hagan esto. En el 2022 nos van a volver a decir esto se tiene que hacer”, dijo Evreinoff al cuestionar las posturas adoptadas en medio de la Operación Cicatriz.
La posición adoptada ya en el marco de Concordia Republicana es que se prorroguen los mandatos partidarios por dos años más, y eliminar la elección de autoridades partidarias conjuntamente con las internas municipales, así como hoy lo establece el Estatuto de la ANR.
El convencional cuestionó que no hay información de lo que se va a estudiar, no se tiene un informe base de lo que va a decir el texto que avalaría una prórroga de mandato. “Imaginate que hoy estamos a seis días (por ayer) de la Convención y yo no tengo el texto definitivo de lo que va quedar redactado en el estatuto”, mencionó el entrevistado.
Sin embargo, lo que para muchos puede resultar una descoordinación, en la lectura de Evreinoff está todo bien estructurado.
“No hay ninguna descoordinación (no saber lo que va a decir la modificatoria). Está totalmente coordinado, porque puedo yo voy a entrar a discutir lo que ellos van a escribir, puedo mostrarle a algún abogado, algún jurista. Ellos quieren hacerlo en el día, no quieren mostrarnos el texto, algo esconden”, refirió el convencional al cuestionar la determinación tomada por la Junta de Gobierno.
UN LLAMADO
Sasha Evreinoff envió un mensaje a sus colegas convocados para la Convención Colorada virtual del sábado, y mencionó que este es el momento en que la dirigencia colorada exija respeto a las autoridades, “y salir con la frente en alto y darle un no roturando al autoritarismo y a la violación de los derechos democráticos y participativos”.
Y en este sentido, remarcó que hoy los principales colorados en situación de poder, ya sean estos del Ejecutivo o del Legislativo, en su mayoría abdistas y cartistas, se vieron con una realidad, que la ANR no de ellos.
“Acá hay una realidad. Cuando pensaron que jugaban solos el partido en nombre de una supuesta unidad partidaria, que no es otra cosa que la unidad de dos movimientos (Colorado Añeteté y Honor Colorado), aparecimos un grupo de convencionales que le dijimos que no estamos dispuestos a violar nuestro estatuto partidario, y quizás hoy no somos mayoría, pero somos suficientes”, remarcó Evreinoff.
La ANR tiene un total de 1.137 convencionales, y para que en el primer día haya quórum deberán estar conectados 570 de ellos. Ahora bien, si por el camino se van desconectando o a la hora de votación hay menos convencionales presentes, de igual manera queda aprobado lo que decidan, aunque al final resulte ilegítimo.
Incluso, si no hay quórum el día uno, se llama para el siguiente día y se realiza la Convención Colorada con los presentes, y ya no se necesita de quórum.
Por último, cuestionó que el sistema informático tampoco ofrece garantías, porque en la prueba que se realizó el sábado pasado se tuvo un total de 246 en el momento de mayor conectividad, de los cuales 48 eran técnicos.
“Si el técnico se pudo conectar de la misma forma en que yo me conecté, cómo se que el técnico no vota. Qué garantías tengo de los resultados, porque tengo que marcar el sí o el no, y no sabemos si eso puede ser alterado, a diferencia de las votaciones en el Congreso que se hacen mostrando tarjetas y queda una fotografía de ese momento”, refirió el convencional colorado.
Y para finalizar remarcó que ni siquiera hay garantías para el uso de la palabra, porque no se sabe en el sistema en qué posición uno está.