La senadora y precandidata presidencial por el Frente Guasu, Esperanza Martínez, habló de los pactos que deben encarar con respeto y madurez dentro de la concertación, afirmando que no hay alternativa viable para la oposición fuera de ella.
“En marzo dimos un paso al costado para trabajar un proceso de consolidación interna, que significó la presencia de nuevas fuerzas políticas con el Frente Guasu, que hoy se llama el Ñemongeta. Consolidamos a nivel territorial el proceso de unidad y estuvimos en 7 departamentos, avanzando en lo que serían las listas plurinominales, principalmente para el Senado”, contó la parlamentaria.
Recordó que una vez finalizado todo ese proceso interno, se anunciaría si El Frente Guasu integraría o no el proyecto de la concertación, más allá del hecho de estar o no de acuerdo en que es favorable para la ciudadanía, teniendo en cuenta que el Partido Liberal tiene un rol protagónico en las internas con sus fuerzas políticas, su estructura y dinero, frente a los partidos más pequeños.
“La realidad política es esa, pero pensar en una jugada fuera de la concertación, plantearía la posibilidad de dos candidaturas de la oposición, que al final restarían probabilidades al sector de ganar en el 2023”, reconoció la senadora Martínez.
Por ello, finalmente el Frente Guasu, siendo prácticamente el único partido de oposición con un electorado importante que no había anunciado su integración en la Concertación, terminó formando parte del proyecto opositor que busca ganar con un espacio en el Ejecutivo para el 2023.
Ayer anunciaron su adherencia y también el mismo día, a través de Fernando Lugo, líder de las nucleaciones de izquierda, solicitaron una reunión con todos los candidatos y candidatas de la Concertación. Teniendo eso en cuenta, mañana 09:00 a 11:00 se prevé la primera reunión oficial de la Concertación Nacional, con todos sus actores, junto con la participación oficial del Frente Guasu.
“La idea es avanzar sobre ese tema, escuchar a los diferentes precandidatos y pensar cómo podremos construir ese espacio final. A nosotros nos interesan los acuerdos programáticos y el proceso de cogobierno y gobernabilidad política; por supuesto no todos llegarán al final, pero necesitamos que las fuerzas detrás de cada candidato mantengan una alianza política y estratégica de gobernabilidad para apoyar a la presidenta o presidente electo”, destacó la parlamentaria.
Aseveró que no cree en la existencia de una conciliación amorosa, donde cada sector de la oposición se sientan felices como en un cuento de hadas, pero de todos modos debe haber un mínimo de respeto, con las reglas de juego claras, teniendo también la grandeza de respetar los resultados aunque no parezca favorable para todos. “Habrá algún tipo de contienda electoral al final porque es inevitable y puede haber matices sobre eso, acuerdos intermedios entre algunos actores”, determinó.
No obstante, contó que lo importante es tener un pacto ético, político, de madurez, para que cuando gane alguno de los precandidatos sea apoyado por cada una de las fuerzas opositoras, de tal manera a que se enfrente al Partido Colorado con verdadera unidad programática y de gobernabilidad política en el 2023.