El pasado viernes, el Consejo de la Magistratura conformó la terna de candidatos para ocupar el cargo de ministro de la Corte. La vacancia se produjo el pasado 16 de agosto, con el fallecimiento de Gladys Bareiro de Módica a causa de un cuadro de peritonitis.
Los candidatos electos fueron Alma Méndez (puntaje 80,41 de 100), el senador liberal Víctor Ríos (77,58) y Gustavo Ocampos (73,64).
Según trascendidos, la Cámara de Senadores elegirá al ganador recién la próxima semana.
Méndez fue la mujer con el máximo puntaje obtenido en el concurso. Señaló que su elección lo tomó como un reconocimiento a su larga trayectoria y un compromiso para seguir y mejorar aún más su labor.
A continuación, responde a algunas consultas.
¿Cuáles son sus expectativas?
Estamos entrando en la etapa política de las elecciones. Obviamente con expectativas positivas porque soy de la casa. Me interesa que la institución funcione y el servicio de justicia llegue a la ciudadanía porque estamos en deuda con ella. Hay reclamos obviamente en ese sentido.
¿Qué opina de la politización de las elecciones?
Es la sexta vez que participo en un concurso y la segunda vez que quedo en la terna. Lo que sí puedo decir es que percibí la intención de los miembros del consejo de transparentar todo el proceso. Desde luego, todo proceso es perceptible. Pero en líneas generales, el tema de transparencia, rescato. Ahora, entramos en la etapa política y habría que ver cómo se maneja.
¿Por qué deberían elegirla?
Yo podría aportar sin desmerecer a los demás integrantes de la terna. Como soy una persona que trabajó durante 10 años como profesional independiente y hace 23 años en la magistratura. Tengo una visión integral de la Justicia desde adentro y desde afuera. Entonces, conozco nuestras partes débiles y las partes que debemos fortalecer. Esa visión integral, creo que va a ayudar y aportar al servicio de la justicia.
¿Si es electa, como hará para no caer en actitudes cuestionables?
Creo que se tiene que mirar la trayectoria y la hoja de vida de la persona. La gente que elegirá al ministro de la corte deberá analizar el perfil. Es muy difícil cambiar la forma de ser de alguien de un día para el otro. En un proceso judicial siempre alguien pierde y otro gana. Normalmente los que ganan no tienen nada que decir. Pero pierden no asumen las responsabilidades en el supuesto caso de que haya habido problemas en el planteamiento de la defensa. Siempre culpan al juez. El juez o la jueza debe dictar lo que corresponda conforme a derecho. A algunos va a conformar y a otros no. No debe mirar al destinatario de la sentencia. En ese sentido, el magistrado tiene que tener la suficiente entereza y templanza para resistir los embates que puedan venir de uno u otro sector. Eso solo se logra cuando las resoluciones están fundadas, cuando uno puede sostener su criterio. Siempre a uno le va a gustar y a otros no la decisión de un magistrado.
¿Tiene la suficiente entereza y templanza para ser ministra de la Corte?
Yo entiendo que si por eso estoy desde hace 23 años en la magistratura.
¿Viene de familia colorada?
Mi papá era afiliado al Partido Colorado. Mi mamá no tenía afiliación, yo nunca me afilié.
¿Cuál fue el momento en que decidió candidatarse?
Cuando uno está adentro, tiene conocimiento de la casa por decirlo de alguna manera. Cree que hay cosas que deberían cambiarse, otros que deberían perfeccionarse o seguir de la misma forma.
Uno tiene ganas de darle cosas a la ciudadanía. Hay que tener en cuenta que es un colegiado. Uno es una persona dentro del colegiado. Puede tener muy buenas intenciones, pero eso debe acompañar al grupo. Por eso me presenté.
¿Cómo hará para lidiar con las presiones políticas?
Solamente con la templanza de carácter. Depende de cada magistrado, no hay otra forma.
¿Existe una desconfianza justificada hacia la justicia?
La ciudadanía tiene toda la razón porque yo conozco la institución desde adentro. Conozco el esfuerzo de muchas personas que buscan hacer bien su trabajo, pero no tienen un impacto importante a nivel global. La ciudadanía siente que es ineficiente. También insisto en la capacitación, actualización e idoneidad. Venimos con problemas desde la formación universitaria.