La bancada de Honor Colorado en la primera sesión del año en la Cámara de Diputados mostró sin vergüenza su lado más impúdico al generar todo un discurso en contra de la narcopolítica y el crimen organizado.
Mientras el Exministro del Interior se expone a la intimidación del abogado defensor del ex presidente de la República Horacio Cartes al presentarse en su audiencia, la Contraloría y Seprelad son cuestionadas por su accionar al no verificar los bienes y las operaciones del ex mandatario en su debido momento.
Giuzzio argumentó que una serie de “supuestos prestamos” realizados al entorno de Horacio Cartes les hace sospechar sobre un esquema de lavado de dinero. Es “la cabeza del crimen organizado en la región”.
Cuando toda una bancada liderada por el principal sospechoso de tener el único liderazgo en el mayor esquema de lavado de dinero en la historia del Paraguay, insiste con un discurso en el cual eleva la bandera de la transparencia y la lucha contra el crimen organizado nos hace presumir que el sentido de impunidad está más vivo que nunca.
La bancada de Honor Colorado defiende el accionar de la Fiscal General del Estado que según los puntos de libelo acusatorio tendría como fundamentos para la destituciones justificativos puntuales:
Estafa del Metrobús, donde se argumenta la inacción por parte de la fiscalía para investigar y sancionar a los responsables, entre los que se encontrarían el ex Ministro de Obras Públicas Giménez Gaona y el propio ex mandatario. Las denuncias incluyen daño patrimonial al presupuesto público.
La otra acusación es en el marco de la investigación del caso Darío Messer quien actualmente cumple una condena de 18 meses en Brasil por lavado de activos (Caso Lava Jato). A pesar de contar con numerosas pruebas expuestas desde la Comisión Bicameral de Investigación del Congreso donde se exigía la investigación de una lista de personas entre las que figuraba Horacio Cartes, por el mismo delito de lavado de dinero por el cual Messer fue condenado en el vecino país.
En el punto número tres del libelo acusatorio presentado por la oposición y firmado también por diputados colorados pertenecientes al movimiento Añetete figura el caso de Zero Um, Roque Fabiano Silveira señalado por medios brasileños como socio comercial del ex presidente Horacio Cartes en el esquema de contrabando de cigarrillos producidos por la empresa nacional del Grupo Cartes.
En este proceso Zero Um fue beneficiado con una suspensión condicional del procedimiento dejando de lado toda la investigación vinculada con las denuncias.
Con todo y esto, la bancada liderada por Horacio Cartes se ocupó de exponer en el pleno el desafío de contar con políticos que no estén manchados por el crimen organizado.