La mayor parte de la producción agrícola está centrada en el cultivo de la soja, el maíz y el trigo, representando el valor bruto de la producción de estos tres rubros. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), expuso que las producciones mencionadas representan el 76% del total de la agricultura en Paraguay.
No obstante, pese a ese importante factor productivo que representa el país, datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), recopilaron cómo se vive la inseguridad alimentaria en la nación, detallando dentro de su estudio que son cinco los departamentos que más padecen esta realidad, entre sus formas moderadas y graves.
Entre ellos se encuentran Caazapá, Itapúa, Alto Paraná, San Pedro y Caaguazú, entre los cuales los tres primeros se caracterizan por ser referentes en términos de producción de soja, maíz, girasol, arroz, trigo, algodón, entre otros. ¿Cómo es posible que las zonas con más potencialidad en términos de productividad no puedan responder eficazmente a las carencias alimentarias?
Esto teniendo en cuenta que, pese a ser altamente representativos y poseer una buena distribución de sus tierras, el tridente de los departamentos mencionados no solo tienen una baja calidad y cantidad en el consumo de alimentos, sino que también un importante porcentaje de familias de esa zona dejan de comer por uno o varios días porque no les alcanza.
Para el titular del Ministerio de Desarrollo Social (MDS), Mario Varela, esto representa de manera directa un efecto postpandémico porque la triangulación del comercio fronterizo forma parte de la economía de los departamentos mencionados, sin mencionar la cantidad de personas que dependen del comercio informal de las zonas.
Mario Varela
“Nosotros tuvimos que hacer una asistencia fuerte en la zona de Alberdi, Ciudad del Este e Itapúa, con comedores comunitarios y ollas populares. A raíz de estos datos del INE, ahora redireccionaremos nuestros programas sociales para utilizar más nuestras plataformas de protección”, contó el ministro Varela.
Estos programas consisten en Tekoporã y Tenonderã y este año probablemente duplicarán el desembolso de dichos subsidios para microemprendedores, con una previa capacitación. Actualmente, se encuentran ayudando a 168.000 familias a nivel país, pero su presupuesto les permite aumentar su apoyo a 15.000 familias más.
