viernes, noviembre 15, 2024
32.9 C
Asunción
InicioSin categoríaLa doctrina de los cupos

La doctrina de los cupos

Categoría

Fecha

Mala praxis política resta legitimidad de origen a muchos magistrados

Sería iluso pensar que el llenado de cargos de alta institucionalidad se haga sin participación activa de la política partidaria. La justicia es uno de esos ámbitos, en especial cuando se trata de ministros de la Corte Suprema y de la Justicia Electoral. Es imposible imaginar que ambas instituciones de rango constitucional se conformen con candidatos políticamente asépticos. Un ejemplo basta para demostrarlo.

De los nueve miembros en ejercicio en la Corte Suprema de Estados Unidos, seis son de extracción republicana y tres de pertenencia demócrata, con dos condimentos extra: desde hace 21 años la integra el primer juez negro y ya la conforman cuatro mujeres, una de ellas afroamericana, recién aprobada por el Senado, y una abogada, jurista, profesora y política de padres portoriqueños. Como puede notarse, las variables que se tienen en cuenta a la hora de elegir un juez de la corte en EE.UU. son bastante más complejas que las que rigen en nuestro país.

En el caso del TSJE, la praxis establecida desde que rige la ley de su creación es que los partidos políticos con mayor cantidad de sufragios sean los que se repartan los cargos de ministro, que por orden constitucional son tres. Esto limita considerablemente la participación de partidos, alianzas o emblemas con menor caudal electoral, hecho que inevitablemente colorea las bancas de azul y colorado.

Pero hecho a un lado este capítulo, surge el condicionamiento más importante, es decir, responder a este perfil: poseer título universitario de Doctor en Derecho, gozar de notoria honorabilidad, haber ejercido efectivamente durante diez años, cuanto menos, la profesión, la magistratura judicial o la cátedra universitaria en materia jurídica. No hay manera de versear en este punto. Se es o no doctor en derecho, se goza o no de notoria honorabilidad, se ejerció o no la profesión, la magistratura judicial o la catedra en materia jurídica. No alcanza el “casi”, se es o no se es. Pues bien, este es el caso del candidato liberal a ministro del TSJE cuando a fin de año cesen en su mandato dos de sus miembros.

Tal parece que se está forzando la horma a fin de que el propuesto cumpla el “cupo” pasando a segundo plano el curriculum y privilegiando el carnet partidario.

Cómo se pretende que el país crea en sus magistrados si su legitimidad de origen está cuestionada.

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.

Ducharse, cómo y con qué frecuencia

Parlamento de soleil

Remuneraciones y capacidades

15-11-24