Miriam Orrego, del Sindicato Administrativo y de Seguridad de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, manifestó que continuarán con la huelga que ayer iniciaron para exigir la reposición del del pago del subsidio familiar que venían recibiendo desde el 2017. «Sin una explicación clara cortaron de nosotros», dijo para Radio Ñanduti.
Orrego aclaró que esto recorte proviene del Parlamento y no del Ministerio y anunció que de no obtener una respuesta, desde el lunes harán “brazos caídos”, ya que se trata de un derecho adquirido.
“Paulatinamente vamos a ir dejando de cumplir funciones dentro de las penitenciarías”, expresó. Sin embargo, aclaró que la medida de fuerza no afectará a los servicios de guardia. Explicó además que el subsidio es de un poco más de G. 1.600.000 que se les paga de forma bimestral.
Orrego explicó que ahora los beneficios son brindados únicamente a los funcionarios que cumplen 24 horas, lo cual considera como una aberración. Para el domingo, aproximadamente, tendrán bien claro las medidas que estarán siguiendo, pues las mismas aún no están siendo determinadas.