Luego de la resolución 115/2022 por la cual “se establecen los criterios para el funcionamiento de la modalidad de plurigrado en instituciones educativas de gestión oficial y privada subvencionada”, varios gremios de docentes expresaron su repudio ante la posibilidad de su aplicación, viéndolo como un golpe más para la educación paraguaya.
De este modo, la fusión entre diversos grados como el primero, el segundo y el tercero, se daría en una misma aula, dirigida por un solo maestro. Esta realidad ya se vive con mucha fuerza en el departamento de San Pedro, el cual siendo uno de los más pobres en términos de infraestructura, aplica la metodología debido, mayoritariamente, a una significativa escasez de alumnos en casi todas sus instituciones.
Siendo esta una de las razones por las cuales se podría aplicar el método de plurigrados, Karina Hugo, especialista en educación, creadora de modelos pedagógicos y directora del Centro Educativo “Las Margaritas”, de San Lorenzo, comentó que otras causales de la metodología están relacionadas con la falta de rubros docentes en las instituciones, así como también la necesidad de un cambio dentro de la metodología pedagógica.
Karina Hugo
“Esta escasa cantidad de alumnos se debe específicamente a la alta deserción escolar que hay en departamentos como San Pedro porque los padres no tienen los recursos básicos y enviar a los niños a las escuelas es lo último en lo cual piensan, pues ellos representan una mano de obra para la familia”, especificó la analista.
No obstante, la realidad de los plurigrados no es algo desarrollado exclusivamente en el interior del país, pues en la capital se registran varios colegios con una escasa cantidad de estudiantes o profesores, lo que lleva a optar por la metodología mencionada.
PROFESORES NO ESPECIALIZADOS
Aparte de la modalidad de plurigrados, adoptada en su gran mayoría en los colegios del departamento de San Pedro, otra vivencia de la zona es la nulidad de docentes suficientemente capacitados para ejercer el rubro, pues gran parte de los mismos no son docentes formados.
Al respecto, Hugo resaltó que dicha realidad se vive a nivel país: en zonas indígenas del departamento de Canindeyú, por ejemplo, se encontraban maestros ejerciendo el rubro del primero y segundo, pero nunca habían pasado por una capacitación docente formal. Con respecto a San Pedro, allí ni siquiera cuentan con un centro de formación docente, por lo cual el profesor se forma de manera netamente empírica.
“¿Es mejor no tener una escuela a tener una escuela como sea, autogestionada y que los padres funjan como maestros? Si quiero ser maestra de una comunidad, pero debo caminar varios kilómetros para estudiar en un lugar completamente alejado de mi ciudad para especializarme en docencia y no tengo el dinero para hacerlo, ¿qué pasa?”, sentenció, agregando que la problemática es mucho más grande.
De este modo, a decir de la analista, para “crucificar” que una persona sin preparación excepcional en la docencia quiera trabajar como docente en alguna institución, se debe tener en cuenta la necesidad de recursos para todos los individuos, la importancia de una cobertura generalizada para todas las familias, la habilitación de escuelas, sin dejar de lado el análisis de la densidad poblacional, la deserción escolar, entre otros puntos.
“Por ello, la tan mencionada transformación educativa debe contemplar alternativas globales y de mucha cobertura para las realidades mencionadas en nuestro país. Es necesario trabajar de forma conjunta con las gobernaciones, pues la importante mejora de la educación trasciende a ámbitos educativos como los nuestros”, manifestó la profesional.
En ese sentido, resaltó que la pandemia empeoró la situación en la cual se encuentra la educación del país, pues la mayoría de los niños se encuentran en un considerable retroceso en términos de aprendizaje. Este hecho hace que se replantee la metodología pedagógica porque cualquier tipo de recomendación resulta válida para contribuir a la mejora educativa.
