El insomnio, los sobresaltos y los temores, constituyen algunas de las secuelas más comunes que reportaron en redes sociales los asistentes del Ja’umina Fest, luego del aterrador evento que tuvo lugar el pasado domingo en San Bernardino.
La psicóloga Gloria Petters explicó en este sentido que “es válido que cualquier persona ante una circunstancia de esta naturaleza empiece a desarrollar signos de estrés post traumático, más todavía si hablamos que existió el consumo de alcohol u otros aspectos que hayan aumentado la posibilidad de la sensibilidad y la condición de estar en hipervigilancia. Además, en una actividad de esa naturaleza tenemos muchos estímulos visuales y auditivos que, sumados al efecto del calor, ya pueden aumentar el estado de vigilia del organismo”, mencionó.
Según la licenciada, en términos psicológicos, los asistentes al evento pudieron desarrollar un fenómeno denominado “sobregeneralización”. “Efectivamente, pueden aparecer sobresaltos, tensión, dificultades para dormir y existe la posibilidad de tener arrebatos de ira o temores infundados”, indicó.
Para sobrellevar la crisis, Petters aconsejó que los afectados deben optar por limitar el consumo de café e introducir alimentos sanos a su dieta a fin de proveer herramientas al organismo para reaccionar de manera natural ante el trauma. Asimismo, la profesional recomendó realizar un “reset” con el propósito de afrontar el recuerdo aterrador.
“Además de la alimentación saludable, se recomienda limitar la utilización de las redes sociales y los estímulos visuales para evitar estar sobreexaltados y sobreestimulados ante una situación que me causó un trauma. Se tienen que realizar técnicas de respiración. La gente tiene que tomarse el tiempo en forma más pausada y hacer como un reset para poder salir adelante”, manifestó.
RIESGO DE ESTRÉS POSTRAUMÁTICO
Ante el riesgo de desarrollar estrés postraumático, Petters expresó que si esta clase de signos se prolongan durante alrededor de un mes, el afectado debe recurrir necesariamente junto a un profesional para recibir contención psicológica.
“Generalmente, inmediatamente después de la situación traumática ya aparecen los síntomas. No obstante, para que sea un trastorno que requiera la implementación de un tratamiento terapéutico, los síntomas tuvieron que prolongarse por más de un mes”, comentó.
ESPECTADORES TAMBIÉN DESARROLLARON SÍNTOMAS
La psicóloga refirió que los espectadores externos a la tragedia también pudieron haber desarrollado signos de estrés postraumático a partir de la gran difusión de imágenes de la tragedia en diferentes canales como, por ejemplo, las redes sociales.
“Aparecen las pesadillas, escenas retrospectivas y más todavía con las redes sociales, porque estamos inundados del mismo evento. También existe la posibilidad de que los afectados desarrollen reacciones fisiológicas, porque al ver las imágenes se puede tener la respiración pesada (aumento de la frecuencia cardíaca) y sudoración”, expresó.
De esta forma, la profesional recalcó que si estos signos se prolongan por alrededor de un mes, los afectados deben recurrir a un profesional para recibir asistencia psicológica.
“Todos estos signos sí pueden aparecer, pero eso no significa que tengo un trauma, sino que estoy con estrés tras una situación aterradora. Si esto se prolonga por aproximadamente un mes, ya se debe recurrir a un profesional”, concluyó.
