Sandía, la fruta del momento

La sandía contiene licopeno, que es especialmente importante para nuestra salud ósea. El licopeno dietético, que está presente en algunos alimentos como la sandía o los tomates, reduce el estrés oxidativo.

Por otro lado, un estudio llevado a cabo por la American Journal of Hypertension encontró que la suplementación de extracto de sandía reduce la presión arterial de tobillo, la presión arterial braquial y la presión de la carótida en los adultos obesos de mediana edad con hipertensión leve.

Esta fruta es un gran fuente de beta-caroteno (por eso ese color rojizo de su interior) que se convierte en vitamina A. Ayuda a producir los pigmentos en la retina del ojo y protege contra la degeneración macular relacionada con la edad. Asimismo, previene la ceguera nocturna, mantiene la piel, los dientes, los tejidos esqueléticos y blandos y las membranas de las mucosas saludables.

EFECTO ANTIINFLAMATORIO
La sandía es rica en compuestos fenólicos como los flavonoides, carotenoides y triterpenoides. El licopeno carotenoide de esta fruta es beneficioso en la reducción de la inflamación y la neutralización de los radicales libres.

La triterpenoide cucurbitacina E también está presente en la sandía, y proporciona un soporte antiinflamatorio bloqueando la actividad de las enzimas ciclooxigenasas que normalmente producen un aumento inflamatorio. Las sandías maduras contienen cantidades más altas de estos compuestos fenólicos beneficiosos.

Ingredientes para una ensalada de sandía:
1 taza de cubos de sandia– 100 g
1 cucharada de albahaca picada
1 cucharada de zumo de limón .
1-4 taza de cebolla morada , con el corte que más te guste .
5 almendras tostadas y picadas
Sal marina y pimienta.
Procedimiento
Mezclar los ingredientes y acompañar con la proteína o verdura que más te guste.