El uso de las redes sociales se vuelve cada vez más constante en la vida de todas las personas; tal es así que la realidad se ha vuelto prácticamente tecnológica. Casi todos los procesos de comunicación empiezan y terminan en una red social y lo mismo se vislumbra con las interacciones llevadas a cabo entre los individuos.
Facebook, WhatsApp, Instagram o Twitter, si no son todas, al menos una de estas plataformas es utilizada asiduamente por las personas. De acuerdo a un material publicado por el medio español La Vanguardia, ya son miles de millones quienes se comunican por medio de las redes sociales.
Alrededor de 3.810 millones de personas en el mundo utilizan las redes sociales, según el último informe de DataReportal. Es casi la mitad de la población del planeta y por ello resulta prácticamente innegable que las plataformas digitales contienen muchos datos y parte de la vida de los usuarios.
Como ya su uso se volvió muy habitual, ¿te sorprendería saber que no poseer redes sociales o no ser una persona muy activa en ellas puede convertirte en alguien más atractivo?
EL ENCANTO
Probablemente no exista una razón central o un parámetro absoluto para determinar qué hace a una persona muy atractiva o poco interesante. Sin embargo, teniendo en cuenta un trabajo realizado por el medio Vice, James Preece, un experto en citas, explica que las personas por lo regular se sienten atraídas por el misterio en general cuando se trata de citas y esto se extiende a las redes sociales.
«Si no puedes ver lo que hace alguien y saber qué está pasando en su vida, entonces estarás intrigado», afirmó el profesional, agregando que cualquier tipo de misterio o indisponibilidad es inmediatamente una cualidad atractiva.
Así también, para Hayley Quinn, otra experta en citas, a menudo el misterio puede beneficiarte más a vos, esto considerando que alguien puede creer erróneamente que ya sabe todo sobre tu persona, al basarse solo por tus redes sociales.
En este punto, Quinn aseguró que sin una red social o al tener una cuenta privada, se puede despertar la curiosidad de alguien que buscará conocerte mejor en el mundo real. El encanto puede relacionarse con la percepción inicial creada cuando se conoce en un principio a una persona, pues se asume que podría ser más interesante simplemente por no estar muy activo/a en las redes sociales.
PLATAFORMAS DIGITALES
Con la constante participación digital en diversas redes sociales, también se puede llegar a interpretar que las futuras citas o encuentros con personas se pueden llevar a cabo luego de un exhaustivo análisis del perfil o la cuenta de alguien de tu interés.
Si por alguna casualidad, llama tu atención físicamente por algunas fotos publicadas en su Instagram, otro material visual que no sea de tu agrado puede llevar a afectar tus concepciones con respecto a la persona, pues podrías llegar a “descartarla” simplemente porque no te gustó cómo se ve en una imagen.
La manera en que utiliza diversos filtros en sus redes sociales, qué tipo de contenido publica y cómo se ve estéticamente hablando, son solo algunas de las características notorias que preponderan en los preconceptos establecidos a la hora de decidir si alguien te parece muy atractivo o no.
Reiterando, en Vice habían hablado del trasfondo existente en este tipo de apreciaciones, adjudicando en parte algunas razones en la superficialidad de las personas, pues directamente relacionan el contenido de alguien con su forma de ser y cuán interesante puede llegar a ser.
Antes de que conozcas completamente a una persona, de manera inconsciente pone a disposición una diversidad inagotable de datos personales en sus redes sociales, que al final la terminas conociendo de alguna u otra manera, por medio de un “filtro” digital que te hace analizar si en verdad te gustará alguien como un interés amoroso.
