Mayor irritabilidad, ataque de antojos y leves, pero profundos momentos de tristeza, ¿te ha pasado en más de una ocasión, verdad? Estamos hablando de los síntomas premenstruales, aspectos que no son indiferentes para la mayoría de las mujeres por el aluvión hormonal que constituye.
Indicando principalmente que el período se acerca, estos síntomas representan el nivel de sensibilidad que puede jugar con las emociones femeninas. En más de una ocasión seguro pasó que después de que te bajara, comprendiste por qué una publicidad te hizo llorar hace dos días, relacionando tu susceptibilidad con la menstruación que se te presentó.
De todos modos, pese a que representa un hecho cotidiano para más de una, ¿por qué las emociones se ven específicamente alteradas y cuál es la diferencia entre el trastorno disfórico premenstrual (TDPM) y el síndrome premenstrual (SPM)?
CONOCÉ TU CUERPO
Según la oficina para la salud de la mujer, el SPM se trata de una combinación de síntomas físicos y emocionales, incluidos los cambios de humor, sensibilidad en los senos, antojos de comida y fatiga, después de la ovulación y antes del inicio de su período menstrual.
“Ciertamente, el SPM presenta desde síntomas leves, hasta muy intensos dolores de cabeza, cintura, piernas, bajo vientre, etc., mientras el TDPM puede presentar manifestaciones más graves y llamativamente repetitivas cerca de la menstruación”, diferenció la Dra. en Ginecología, Mirta Ruiz.
Se calcula que 3 de cada 4 mujeres que menstrúan han experimentado alguna forma de síndrome premenstrual, que luego desaparece en el transcurso del período de menstruación. Por otro lado, el TDPM es similar, aunque incluye depresión, ira, ansiedad, irritabilidad y tensión.
“En la mujer las hormonas varían en cantidad y producción cada día. Existen picos de concentración de hormonas antes de la menstruación, por eso los síntomas se presentan en coincidencia con la proximidad de la menstruación”, explicó la Dra. Ruiz.
TRATAMIENTOS A TENER EN CUENTA
La ginecóloga dijo que siempre es importante dar seguimiento cercano a estos cuadros, pues algunos pueden dar un indicio sobre el pronóstico de la fertilidad de la paciente. Además, ayuda a sobrellevar el ambiente familiar que puede verse alterado con cada crisis.
“Todo lo que hagamos debe ir dirigido a mejorar la calidad de vida de la paciente. Existen medicamentos específicos para aliviar los dolores, pero lo más recomendable es mejorar la actividad física y la alimentación. Muchos de estos trastornos son exacerbados por el consumo de alcohol, cigarrillo y otros”, indicó la Dra. Ruiz.
La misma destacó que ha tenido muy buenos resultados recomendando evitar el consumo constante de carne roja, picantes y, en su lugar, aumentando la ingesta de frutas y verduras.
“En cuanto a la cantidad de pacientes que consultan conmigo, un 40 % corresponde a mujeres con SPM, en mi práctica diaria de las consultas ginecológicas. Por su parte, los TDPM son realmente más raros, como el 5 % aproximadamente”, contó la Dra. Ruiz.
Por esto resulta tan indispensable realizarse chequeos con cierta regularidad, no solo para comprender mejor lo que sucede con nuestro cuerpo, sino también para saber qué tipo de herramientas implementar, dependiendo del estado físico y emocional por el cual estés atravesando.
Es necesario reiterar que con el TDPM estamos hablando de una tristeza o tensión que priva a la persona de seguir con su cotidianidad. No es algo tan simple de controlar, no basta con una medicación, meditación o ver lo positivo en la vida, es una composición química dentro del cuerpo difícil de contrarrestar.
Entonces, escuchar tu cuerpo y sus necesidades será clave para estar al tanto de lo que sucede contigo y también para saber por qué tenés reacciones emocionales muy intensas durante algunos espacios de tu período.
Aunque la incomodidad menstrual es algo que se encuentra inherente a la vida de cualquier mujer, tampoco se deben normalizar las sintomatologías que van dirigidas a extremos muy dolorosos o vaivenes hormonales intensos. Cuidá tu cuerpo y tus estados de ánimo, ese es el consejo de los especialistas.