Fan de los atardeceres, Ana Paula Céspedes de 23 años ha tomado renombre por ser una multifacética piloto paraguaya, con un gran carisma y valor que realzan su personalidad.
Confesó que desde muy chiquita le llamó la atención la aviación, a temprana edad iba constantemente al aeropuerto, ya que su padre también es piloto y se volvió su gran inspiración.
“Al terminar el colegio empecé el curso de piloto privado, fue algo que esperé con ansias. Pero realmente lo primero que hice fue aprender el abecedario aeronáutico por mi cuenta, cuando estaba en último curso”, señaló.
Mencionó que como toda carrera nada es fácil, requiere de mucha paciencia y por sobre todo predisposición a un aprendizaje constante, a críticas constructivas y a días donde todo sale bien y otros donde las cosas requieren de más práctica.
“Como mi instructor me decía y lo digo siempre: esta es una profesión de resistencia”, reflexionó.
Sobre la incursión de las mujeres en el pilotaje, afirmó que un 5% a nivel mundial son mujeres y que cada vez se observa que se animan más a incursionar en este mundo.
“De a poco se va abriendo el campo en el país y de manera rápida, porque en el tiempo que llevo en esto puedo decir que las oportunidades hoy en día hay”. Destacó que posee un muy buen trato con sus colegas, desde el principio fueron y son increíbles con ella.
Finalmente, Céspedes compartió que su mayor meta es volar hasta ser muy viejita.
“Capaz esta no sea la respuesta que muchos esperan, pero creo que no hay que cerrarse a nada y estar preparados para todo, uno nunca sabe lo que puede pasar, como piloto lo que realmente importa es volar”, concluyó la joven.