A pesar de los US$ 500 millones, que Hacienda transfirió a Salud a inicios de Abril en el marco de la Ley de Emergencia, la cartera sanitaria apenas ha utilizado US$ 47 millones. Es decir, un 9,4% del presupuesto.
Julio Mazzoleni, ministro de Salud como Julio Borba, nuevo viceministro de Atención a la Salud, coincidieron en responsabilizar a la excesiva burocracia en la ralentización de las compras.
Sin embargo, el día de hoy, la municipalidad de Villa Elisa, a cargo del liberal Ricardo Estigarribia, inaugurará un pabellón de Contingencia que tendrá un total de ocho camas de terapia intensiva. Lo llamativo es que se realiza con fondos propios (alrededor de G. 1200 millones) y en solo 10 días.
Blas Lanzoni, senador nacional por la bancada A del PLRA, expresó al respecto que la gestión de Salud es lamentable. Esto, en el sentido de que a pesar de los millonarios recursos que se poseen, no se pueda hacer las compras necesarias.
“Hemos dado un cheque en blanco a Salud pero no se realizaron las cosas que se debieron realizar. Se llevó al país a cuarentena para equipar y seguimos llorando por la falta de insumos”, cuestionó.
El legislador expresó que no se debe cambiar al ministro porque eso implicaría iniciar todo de nuevo. Pero que sí debe aclarar muchas cosas una vez termine la pandemia.
“Un intendente con un presupuesto escuálido ha construido un hospital de contingencia en una semana. Con solo ese detalle ya se responde a como es la gestión de Salud”, cuestionó.
ARÉVALO
Martín Arévalo, senador nacional por la ANR (Añeteté), en contrapartida a Lanzoni, defendió a su compañero de equipo Mazzoleni. Expresó que en su momento ya había aconsejado al ministro de Salud que cambie a algunos de los integrantes de su equipo administrativo. A lo que Mazzoleni respondió que sin pruebas no lo podía hacer.
Es decir, mucho de la credibilidad y la gestión de la cartera sanitaria fue por los integrantes de la parte administrativa.
“Además de esto con la intervención de Arnaldo Giuzzio, las compras se hacen más lentas. Esto crea una maquinaria burocrática pesada que relentece todo”, manifestó.
Uno de los hombres a los que hacía referencia Arévalo fue Alcides Velázquez, quien en Abril renunció al cargo luego de denuncias de irregularidades.
Finalmente expresó que confía en la honestidad del ministro de Salud. Señaló que los problemas en compras públicas a causa de la pandemia se tienen en todas partes.
“Es fácil cuestionar, lo difícil es sumar y buscar soluciones y no solamente culpables”, mencionó.