La fascinación del “sueño americano” se ha vuelto cada vez mas esquivo y peligroso para los muchos que desean ingresar al territorio de los EEUU. Leyes más duras, muros, cercos alambrados y deportaciones masivas son las respuestas más frecuentes y comunes desde el otro lado del Río Bravo.
Estados Unidos es difícil verlo cómo un país por su dimensión, población, compleja forma de administración y movimiento demográfico. Es un país que se da ínfulas de ser un melting pot (una olla común)de ciudadanos de todo el mundo o que usa masivamente mano de obra barata en su agricultura para mantenerse competitivo pero es duro al mismo tiempo con las medidas antimigrantes.
Los servicios migratorios representan un duro filtro para el inmigrante que desde la frontera con México tiene hace años una intensa actividad migratoria, ese movimiento se inicia durante el siglo XIX, en 1848 con la firma del Tratado de Guadalupe Hidalgo entre México y Estados Unidos.
Condiciones duras
Grandes grupos de personas provenientes de Guatemala, Honduras, Nicaragua hacen un duro viaje del que unos logran atravesar la frontera sin problemas y otros son detenidos en el Centro Residencial Familiar del Condado de Karnes del Estado de Texas, en este lugar hay muchas historias que son contadas en el medio inglés “The Guardian” en una historia titulada ‘Vamos a morir de tristeza’ que dice entre otras cosas: “Los padres y sus hijos se reunieron tras las rejas, en este nuevo viaje de lectura uno puede leer palabras de un triste migrante que describe a su hijo cómo un joven abierto y feliz y con el tiempo caminando con él desde Guatemala hasta la frontera fue cambiando su actitud. Ha perdido cuatro libras desde que llegamos aquí. No es el mismo niño,” dijo su padre, Luis. “El psicólogo me preguntó si quería darle algún medicamento. Les dije que la mejor medicina es la libertad. Todo lo que necesitamos es ser libres.” Una crónica dolorosa pero cierta que afecta a muchos incluidos paraguayos que usan esa ruta para labrarse un sueño que no tienen en su país de origen.
Libertad hacia otra vida es por la cual muchas familias sin saber con lo que en ese oscuro viaje se van a encontrar. Luego de meses traumáticos. Luis y Luis Jr son dos familiares. con una historia interesante. Después de cruzar ilegalmente el Río Bravo hacia el sur de Texas, la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos los arrestó y separó.. Luis Jr fue trasladado a un refugio durante un mes, mientras que su padre fue procesado en el sistema de justicia penal con tolerancia cero. Aunque ahora están reunidos, el padre e hijo – y miles de personas como ellos – se enfrentan a un nuevo horror: la detención indefinida.
Grandes contradicciones
Los números hablan por sí solo. La cantidad de ingresantes no paró incluso con la pandemia. EEUU tuvo un presidente que no estaba para presidir bien ni algunas de sus empresas, Donald Trump y que hizo de la cuestión migratoria su bandera electoral. Joe Biden su sustituto proyecta dar la nacionalidad a 11 millones de personas sin papeles en ocho años.
Sin embargo hay algunas cosas interesantes como que Barack Obama llegó a la presidencia de los Estados Unidos con más del 70 por ciento del voto latino, pero se fue como el mandatario que más inmigrantes ha deportado en toda la historia del país. Lo que así y todo no es una buena referencia para el partido que representó.
País que más referencia e historias tiene sobre la migración en los Estados Unidos a través de sus medios de comunicación, trabajando la presión mediática a un país que casi siempre brilló por defender y proteger los derechos humanos.
En época de pandemia no toca criticar tanto y apuntar lo que la política ha hecho mal para el ser humano ciudadano que tiene hoy día escoger entre migrar a otro país o sobrevivir en un mundo muy golpeado que sigue en la cruzada por la vida y la salud aunque la ruta siga oscura para los inmigrantes y para los que se quedan en casa.