Uno de los temas sobre los cuales se ha venido hablando mucho en los últimos tiempos es el avance en términos de vacunación y especialmente la calidad de las vacunas. Hay muchos que se oponen a ser inoculados simplemente porque todas las vacunas son de carácter experimental, hasta ayer, cuando la oficina encargada de administrar el uso de medicamentos de forma masiva le dio el visto bueno a la vacuna Pfizer para decir que ha dejado la fase experimental.
Se ha comprobado su eficacia y muchos creen que será el momento en que aquellos que por millones se oponían a ser inoculados con vacunas experimentales, pasen a confiar en las mismas y tengan que llegar al punto de inoculación de más del 70 u 80%, que es cuando podría acabarse la propagación del coronavirus.
Es una muy buena noticia la que vino de Estados Unidos y también puede dar paso a que otras que han llegado a ser utilizadas en forma experimental, de forma masiva en miles de millones de dosis y se ha comprobado su eficacia, tengan el mismo final.
Con eso realmente se puede convencer a los que siguen creyendo que, por ser experimentales, las vacunas no operan de forma beneficiosa a pesar de las evidencias en contrario, donde se demuestra que incluso en países que han aplicado una sola dosis, como el caso de Paraguay, los efectos han sido dramáticamente favorables, en el sentido de haberse reducido el número de personas muertas u hospitalizadas.
