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UNA POLÍTICA QUE SE SIRVE, NO SIRVE

Existen realidades que consideramos natural a la condición del Estado cómo que el gobierno suba más impuestos, mientras la corrupción se lleva dos millones de dólares al año. Sino se revierte esto, “el combustible seguirá subiendo la educación y salud continuarán malas y país.. pobre” con esta fuerte, provocativa y cruda expresión y realidad, empezaba una entrevista al politólogo y profesor Hugo Duarte, quien responde a la pregunta del Dr. Benjamín Fernández en Radio Libre; ¿por qué el paraguayo no entiende la dimensión del problema? El profesor Duarte responde haciendo referencia a Milda Rivarola y de su artículo donde hace un análisis antropológico del Estado paraguayo y que dice: “el viejo acuerdo entre las elites y los viejos políticos del Paraguay es que mientras las élites hacen vista a la izquierda cuando la derecha tiene travesuras en el sector político, tiene el contrapeso de mantener un Estado barato”
Ahora en pandemia abrió la posibilidad de ser testigos de robos descarados a cielo abierto y de costos altamente perjudiciales que el ciudadano consideraba cómo normal en el funcionamiento del Estado. Sostenerse en hechos ilegales para existir, a esta reflexión Duarte responde que no podemos seguir así que implica tocar orejas en Paraguay que generaría una violencia implícita con problemas existentes con gremios que están relacionados al sistema económico y político, sistemas que deben ajustarse en relación a lo que descubrió la pandemia cómo lo que discuten varios medios exponiendo su lado en la discusión mediática política donde por un lado cuando se denuncia que la Unión Industrial del Paraguay (UIP) tiene varios representantes de la misma que lucran con su posición de ventaja y apoyan al gobierno cómo contraprestación por lo que el grupo Cartes se molesta y responde al otro medio diciendo “no hables de eso porque tus empresas hacen lo mismo proveyendo bienes y servicios y asi la discusión continúa sin cambios.
MUCHOS ILLOTAS
Somos espectadores de esta pelea pública de mafiosos. Palabras y funciones que se contraponen porque la política implica una administración honesta y ordenada de la ciudad o polis de forma justa a lo que el mafioso desordena esa administración para proteger sus intereses particulares mirando con indiferencia a lo que necesita el ciudadano en su polis. Podríamos concluir que la sociedad y política paraguaya no tiene cura por tolerar estas discusiones públicas donde los participantes de la disputa que también expone la realidad y fuerza de la inteligencia emocional del paraguayo que esta educado en un sistema perverso que le hace pensar que esta mentalidad que hay entre la gente de arriba y abajo es.. normal.
En esta conversación se concluye que lo mas difícil según el profesor Hugo Duarte es cambiar la realidad política del corazón de América del Sur que continúa latiendo pero a ritmo cardiaco elevado que puede acabar en un infarto del sistema. El Estado, la Nación jurídicamente organizada, no trabaja para le gente sino que lucra de ella y en su desorden diseñado de ex profeso roba y corrompe.

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