Muchos en el mundo no gustan de consumir o tener que pagar lo químico y confían mucho más en lo orgánico y natural por esto que nuestro tereré y mate tienen mucha importancia entre nosotros, por el frecuente uso que hacemos de los “poha ñana” que además de refrescar atienden a órganos de nuestro sistema ya sea para aliviar el dolor o cambiar para bien alguna condición mala que pueda volverse peor.
En otros lugares del planeta se da el regreso de gusanos y sanguijuelas para tratar dolencias. Algunos científicos están haciendo retroceder el reloj en la búsqueda de alternativas efectivas.
Los gusanos secretan unas enzimas digestivas que los disuelven y los definen en una especie de jugo. Una vez listo, los gusanos lo absorben. Así, no solo eliminan las bacterias, sino que también remueven el tejido muerto, cosa que no hacen los antibióticos.
El valor de lo natural
Ya han sido usados en importantes acontecimientos cómo la segunda guerra mundial, las guerras napoleónicas, la guerra civil estadounidense para sanar y responder a las necesidades de los soldados heridos en batallas.
Lo que significa un llamado de atención a la industria farmacéutica y química de la actualidad que se enfrentan a lo usado ayer para sanar o atender las demandas que presentaban los heridos.
Además del cambio que sería cubrir nuestra piel con gusanos también cambiaría nuestro botiquín de primeros auxilios con frascos de estos bichos que reemplazarían al alcohol, la rifocina y lo que sirva para atender heridas. Parece que retrocedemos pero quizás avanzamos en nuevos conocimientos y curas.