Ante la disminución de casos y fallecimientos, existe un temor en el gremio médico de que todos estos avances sean retirados. Cabe recordar que, en los últimos tres días, Salud reportó menos de 20 fallecidos.
Carlos Morínigo, neumólogo, en entrevista para Ñanduti, solicitó que los pabellones de contingencia no sean desmontados por falta de uso. Solicitó que en su lugar sean utilizados como pabellones de rehabilitación pulmonar.
“Hay muchísimas secuelas pulmonares. No puede ser que sigamos dependiendo de oenegés para rehabilitaciones”, afirmó.
INERAM
En ese mismo sentido, Luis Báez, director médico del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente Max Juan Boettner (Ineram), señaló que empezaron a hacer los arreglos para utilizar los pabellones de contingencia para cualquier otra situación de emergencia.
El galeno explicó que las personas que atravesaron cuadros graves de Covid-19, deben continuar con un proceso de recuperación total que puede durar entre 6 a 12 meses.
La mayoría de los internados por cuadros graves quedan con obstrucciones en los pulmones tras salir de alta.
“Esto le genera dificultad para respirar a los pacientes. Muchos quieren hacer caminatas, pero se sienten muy cansados. Tienen dificultades laborales”, comentó.
Un paciente que tuvo una enfermedad de base importante suele presentar estas secuelas post Covid-19.
“Hay muy pocos lugares para hacer la rehabilitación. Además, los que existen tienen una larga lista de espera. En el hospital del Trauma, Villa Elisa, Senadis y otros más”, explicó.
PEDIDO A SALUD
Báez señaló finalmente que hace dos meses presentaron un programa de rehabilitación para implementar en el Ineram. El instituto cuenta con seis pabellones de contingencia armados por la pandemia. Parte de esta infraestructura es la que se quiere destinar al tratamiento post Covid-19.
MEDINA
Idalia Medina, presidenta de la Asociación de Médicos de Alto Paraná (AMAP), expresó que van a presionar, principalmente para que las unidades de terapia intensiva queden tras la pandemia.
“Antes de la pandemia solo teníamos 8 camas de terapia intensiva en el Hospital Regional de CDE y 4 en el IPS. Ahora contamos con 60 camas”, informó.
Además de las camas, el gremio médico solicita que los 12 mil profesionales de la salud contratados por la pandemia, conserven sus empleos.
“Se viene seguro una tercera ola en noviembre y diciembre. Siempre tuvimos inconvenientes en terapia intensiva ya que llega mucha gente de otros departamentos”, comentó.
El hospital Regional de Ciudad del Este cuenta solo con un pabellón de contingencia. La misma será utilizada para pacientes clínicos.