El expresidente de Chile, Sebastián Piñera, consideró que el borrador de la Constitución que fue rechazado en plebiscito era una «muy mala propuesta» y respaldó la redacción de una nueva Carta Magna, aunque con cambios en la asamblea encargada de redactarla, en momentos en que el Parlamento busca acordar una fecha para iniciar un nuevo diálogo entre todas las partes que impulse el proceso constitucional.
«Era una muy mala propuesta, muy mala para Chile, para su futuro, y por eso yo voté ‘rechazo’», reveló Piñera anoche, durante una entrevista con el medio chileno Meganoticias, en la que evaluó que «la Constitución debe ser un gran marco de unidad, estabilidad, que no divida al país, que se haga cargo de los problemas y de las oportunidades» y no «partisana».
«Por eso, yo creo que la propuesta de la Convención no solamente se caracterizó por los escándalos y excesos de algunos convencionales, también en el fondo era una muy mala propuesta que dividía al país, que no ponía las prioridades de la gente en primer lugar, que daba una democracia bastante caótica», agregó sobre el texto que el pasado 4 de septiembre recibió un rechazo del 61,87%.
Consultado sobre el silencio que mantuvo durante la campaña, respondió que «era el tiempo de la sociedad civil» y de «escuchar a la gente», no a los políticos.
Piñera explicó que tanto él como otros expresidentes están «disponibles» para asesorar al actual jefe de Estado, Gabriel Boric, que abogó por convocar una nueva Convención Constitucional para redactar un nuevo borrador que permita enterrar la Constitución redactada durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Piñera, que es partidario de celebrar nuevas elecciones para la conformación de una convención, opinó que ésta debería ser «mucho más pequeña» que la anterior e introducir aportes de «calidad» con la incorporación de expertos y académicos.
«No podemos repetir los gruesos errores que se cometieron con la Convención que fracasó», subrayó, y pese a admitir que «gobernar es muy difícil», cuestionó la labor de las autoridades que «descuidaron las preocupaciones de la gente».
“El gobierno en los últimos seis meses se dedicó demasiado a la Convención Constitucional, a la campaña por el plebiscito, y en mi opinión descuidó las preocupaciones de la gente”, sostuvo Piñera, que resumió que la gente pide «tranquilidad, seguridad, paz, controlar la inflación, más oportunidades de empleo, mejores salarios y una reforma profunda a la salud».
Las declaraciones del exmandatario se producen un día después de que los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, Álvaro Elizalde y Raúl Soto, respectivamente, anunciaran la postergación para la próxima semana de la reunión que debía desarrollarse hoy para avanzar en un nuevo proceso constitucional y «reconstruir los puentes de diálogo» de los partidos.