Santiago Peña derrapó en un reciente mitin político en el Alto Paraná. Les dijo a los empleados públicos ahí presentes y los que lo podían escuchar que ellos no están en sus cargos ni por sus títulos ni por ser guapitos sino por ser parte del partido colorado. Y generó un escándalo del tamaño del país. No hay perfección en nada en el mundo siempre solo buenas acciones premeditadas o estudiadas, analizadas y estudiadas antes de cometerlas. Es natural que con el uso de la palabra en proselitismo se den furcios en los discursos de candidatos dónde, cuándo y a quién sea. Hace poco el candidato presidencial por el partido colorado Santiago Peña tuvo la oportunidad de hacer público ideas que le debieron ayudar a llegar a ser el próximo primer mandatario el 30 de abril hasta el 2028, en dicha ocasión dijo textualmente: «Los que llegan a los cargos llegan gracias al Partido Colorado».
Con eso acentuó así la necesidad de afiliarse al partido colorado y votar por él para poder asegurar puestos de trabajo que solo deberían funcionar con personas preparadas e idóneas como dice la Constitución. Con experiencia y compromiso con la nación jurídicamente organizada: el eEstado para que este responda bien al verdadero mandatario o a usted y a mí, los ciudadanos A fin de este mes vamos a poder votar y botar a los que pensemos que podrían hacer bien las cosas desde el poder y a los que no debieron candidatarse a nada en este periodo donde lo que dicen los candidatos es imperioso recordarlo.
El Estado botín
El tiempo electoral no debe perderse en exponerse haciendo un mal uso de la palabra para llamar la atención y ser retwitteado o viralizado en las redes para que su nombre e imagen se expanda en verdadero el grupo de personas que vamos a determinar quién dirigirá nuestro país. Lo que dijo Peña le hace perder votos creyendo tontamente que con lo dijo abroquela a los colorados que toman el Estado como botín.
El candidato por la ANR instó a funcionarios de la Itaipú binacional a que «mojen la camiseta» y aseguró que los que llegan a los cargos lo hacen gracias al Partido Colorado y no por títulos o ser «guapitos». Estaba enojado Peña porque muy poca gente fue a su mitin y terminó sacudiéndolos y generando una gran reacción ciudadana. Con ello en vez de buscar y asegurar la participación y el voto del funcionario público a su favor se ganó la antipatía ciudadana.
Quien tiene boca se equivoca… dice un viejo refrán. La capacidad de elegir una palabra errada durante un diálogo, discurso o texto, sea en el idioma materno o en uno aprendido, puede equipararse con la habilidad de asimilar los errores cometidos. Peña nos debe a todos una disculpa pública.