“Así como dicen que Paraguay no termina en calle última, yo les digo a todos los compañeros y compañeros universitarios que el mundo no termina en los 406.757 kilómetros cuadrados de nuestro suelo guaraní. Hay que animarse a salir afuera. Oportunidades sobran”, comentó Nicolás Prono, egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Asunción (UNA).
Nico, como se lo conoce, vive hoy en Malta y está cursando una maestría en Derecho Marítimo Internacional que había encontrado en un portal de la página del Gobierno y finalmente le fue otorgado, gracias a la Organización Marítima Internacional, que es una agencia de las Naciones Unidas (ONU).
“El primer paso es animarse. El manejo del idioma inglés es importante y muchas veces excluyente, pero eso, sumado a un buen promedio académico, fruto del esfuerzo durante la carrera, nos abren las puertas a un horizonte lleno de oportunidades. De hacer contactos, compartir nuestra cultura y transmitir la felicidad que nos caracteriza, se encarga nuestra maravillosa paraguayidad”, señaló el actual abogado.
Al ser el primer paraguayo en aplicar y ser aceptado por el Instituto, Nico lleva consigo la gran responsabilidad de dejar bien en alto la bandera tricolor. “Esta beca significa un importante paso en mi formación profesional, luego de haber culminado el año pasado la carrera. Así también, una inmejorable ocasión para dedicar el 100% de mi tiempo y esfuerzo en las particularidades técnicas y académicas propias del sector en el que se desarrolla la maestría”.
La maestría está dirigida a abogados que quieran especializarse en el área y exige, naturalmente, la presentación de una tesis de 10.000 palabras al término del curso. De igual manera, requiere de la redacción de un proyecto de ley, a ser implementado en el propio país, para mejorar las condiciones técnicas, legales y comerciales del sector naval en Paraguay, según las prioridades de nuestra política pública nacional.
“La primera reacción que tuve de amigos y colegas cuando les comentaba de esta maestría fue de sorpresa: ¿Cómo Derecho Marítimo en un país sin salida al mar?, pero realmente es un sector que en nuestro país está creciendo. Simplemente considerando que el Paraguay posee la flota de barcazas más grande de Latinoamérica y la tercera en el mundo, solo superado por Estados Unidos y China, uno se hace la película de la pujanza del sector”.
Sus expectativas son altas, pero su principal anhelo es adquirir todos los conocimientos y las capacidades necesarias para colaborar con Paraguay en este importante sector de la economía.
Malta
Según Nico, las particularidades que tiene la isla son muchas, desde su idioma oficial, que además del inglés es el maltés (un jopara entre árabe, italiano y dialecto siciliano), pasando por su clima mediterráneo y su gastronomía, con marcada influencia de Italia, Gran Bretaña y los países de África del Norte.
“Malta es un país muy pequeño, un poco más grande que la ciudad de Encarnación, pero tiene una vasta historia, ya que fue conquistada por árabes, fenicios, romanos, españoles, franceses y sus últimos ocupantes, los ingleses, hasta el año 1964 donde Malta declaró su independencia”, concluyó el estudiante.
LA MAESTRÍA
A través de un colega, el profesional paraguayo recibió el link del portal de becas de post-grado de la Secretaría Técnica de Planificación, http: //webmail.stp.gov.py/intranet/becas/desplegar-becas.php, en el mes de mayo del 2020. Todas eran ofrecidas a través de la Cooperación Internacional, para numerosos cursos, presenciales o a distancia, maestrías o especializaciones.
Entre ellos, se encontraba el LL.M. – MASTER OF LAW, otorgado por el Instituto de Derecho Marítimo Internacional (IMLI), a llevarse a cabo en la República de Malta, de octubre 2020 a junio 2021. El programa estaba abierto a graduados en derecho con la intención de continuar sus carreras legales en el campo del derecho marítimo, sea en el sector público o en el privado, como así también en la práctica, en la administración o en la academia.
Los dos requisitos excluyentes eran Diploma en Leyes con distinción, de una universidad reconocida y dominio del idioma inglés. Además, el 50% de plazas disponibles estaban reservadas para mujeres que cumplieron con los requerimientos.
La fecha tope de presentación de la candidatura fue el 20 de mayo, por lo que acudió al Decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales para que sea la autoridad, de parte de la academia, que le nominase al máster, y junto con los restantes documentos requeridos: cartas de recomendación, formularios académicos y médicos, certificados de estudios, entre otros, envió su candidatura al correo del Instituto y al correo de la STP.
“Como yo había aplicado a la beca de la cooperación internacional, el Instituto se encargó de gestionar el benefactor. En este sentido, contacté con el Dr. Oscar Cabello Sarubbi, Juez paraguayo en el Tribunal Internacional del Mar (ITLOS), para notificarlo de mi aceptación. Fue un intermediario clave para conseguir el financiamiento que luego me fuera otorgado el 20 de julio por la Organización Marítima Internacional (OMI), que finalmente fue el organismo internacional que me otorgó la beca completa”, recordó.
Por cuestiones relacionadas al rebrote de casos del COVID-19 en los meses de agosto, setiembre y octubre en países de Europa, el Instituto decidió iniciar el curso de forma online, al menos hasta el término del primer semestre (fines de diciembre).
Actualmente Nico se encuentra culminando el segundo mes de clases desde el campus del IMLI, en la ciudad de Msida, República de Malta. Para el traslado recibió el apoyo de la Entidad Binacional Yacyreta, lado paraguayo, en cuanto a los costos del pasaje aéreo y demás expensas referidas a cuestiones administrativas.
