Los estupefacientes deben ser considerados cómo tema de cuidado, atención y preocupación por quienes lo consuman y sus entornos sociales, familiares,laborales, amistades y cualquier círculo que note cambios negativos en el comportamiento de la víctima de haber caído en adicciones que pueden poner en riesgo su salud y vida.
Esta inquietud se da en los EE.UU de los empleados de Tesla y SpaceX que dicen estar preocupados por el consumo de drogas de Elon Musk. Un innovador que parece haber sido ganado por el vicio y la adicción poniendo en riesgo sus inversiones.
El magnate sudafricano visionario conocido por su audacia y emprendimiento, ha despertado preocupaciones entre algunos de sus empleados debido a sus presuntos hábitos de consumo de sustancias psicoactivas. Por esta razón, los ejecutivos y juntas directivas de sus empresas Tesla y SpaceX temen por el futuro de las compañías.
Entre las drogas que llegó a consumir Musk alguna vez ayer se destacan; ketamina, LSD, cocaína, hongos alucinógenos y éxtasis en fiestas privadas.
Musk en riesgo de perderlo todo
Sus empresas ascienden a miles de millones de dólares, cómo el valor de su nombre e imagen para muchos de mi generación que desafortunadamente hemos cambiado nuestros valores y objetivos académicos y morales por el dinero, que no es todo sino solo una herramienta que si está bien administrada tiene importante poder para alcanzar objetivos reales o “virtuales” cómo son etiquetadas algunas ideas de Musk.
Ahora parece afortunadamente haber caído en el consumo de las drogas poniendo en riesgo sus emprendimientos y su propio valor de mercado.
Hábitos no sanos que no tienen porqué continuar en la vida si hemos llegado a conocer las consecuencias que traen consigo abusar de la ingesta de algo que se titula ser estupefaciente, Del latín stupefaciens, participio presente de stupefacere, “aturdir”.El mismo estado que pudo haber tenido el magnate antes y ahora debe estar concentrado y enfocado en sus proyectos para lograr proyectarlos bien sin que nada lo aturda para así evitar que sus inversiones no tengan un buen viaje y arribo a los intereses de mentes sanas. Los mismos que no produzcan preocupación sino admiración y aprobación de quienes lo rodeen.