Crecí escuchando y viendo referencias a la juventud cómo motor de cambios importantes y fuerza imbatible para generar ideas frescas y efectuar mutaciones útiles para todos. Dicen que nacen de mentes libres de prejuicios, sin estar apegadas a ideas ajenas o lo que contamine un pensamiento particular.
Reflexiones que pueden permutar no solo por lo que nos digan los maestros, padres o amigos sino que hay que considerar los cambios ambientales, sociales, económicos, políticos y tecnológicos que contribuyen al malestar juvenil en la actualidad.
La juventud es una etapa de la vida que se considera importante porque representa el presente y el futuro de una comunidad. Los jóvenes son un motor de cambio y progreso en la sociedad, y su energía, creatividad y compromiso con ideales transformadores pueden construir un futuro prometedor, para nosotros y la comunidad.
Cuidar las señales
La salud mental de adolescentes y adultos jóvenes está en declive y se debe en parte a “megatendencias perjudiciales” como la desigualdad financiera, según un nuevo informe publicado el martes en la revista científica The Lancet Psychiatry.
El estado de la economía donde sea no se limita a incidir en finanzas de particulares, empresas, países o cualquier personaje en el campo de la hacienda. Las tendencias globales que afectan a las generaciones más jóvenes también incluyen el robo de salarios, la falta de regulación de las redes sociales, la inseguridad laboral y el cambio climático
Afecta a grupos etarios que son importantes cómo todos en el mundo, donde existimos jóvenes, niños y adultos.
El informe fue elaborado a lo largo de cinco años por una comisión de más de 50 personas, entre ellas expertos en salud mental y política económica de varios continentes y jóvenes que han padecido enfermedades mentales.
Los autores sostienen que la salud mental no es un mero problema individual que debe abordarse después de que alguien enferme; también es necesario centrarse colectivamente en los cambios ambientales, sociales, económicos, políticos y tecnológicos que contribuyen al malestar mental.
Creemos controlar y saber lo que ocurre allí con resonancias magnéticas, citas con psiquiatras o psicólogos, que nos pueden ayudar porque tienen sus estudios y experiencias tratando a otras personas y eso sirve para tener en cuenta a estos profesionales en caso de sentir incomodidades en nuestra mente, que es la potencia intelectual del alma.
El informe ha concluido que las preocupaciones económicas y medioambientales pesan mucho sobre los jóvenes
Aunque la investigación y el discurso público tienden a centrarse en los posibles efectos negativos de las redes sociales y el tiempo frente a la pantalla, los autores del informe subrayaron que los factores económicos y medioambientales también pueden desempeñar un papel importante en el deterioro de la salud mental de los jóvenes.
