En este momento podemos decir que Estados Unidos está vacunando a más paraguayos que el propio gobierno paraguayo a los suyos, debido a la gran cantidad de compatriotas que viajan con destino a ese país.
Varias compañías aéreas han tenido que duplicar la cantidad de frecuencias con destino a Miami y Nueva York. Esta última ciudad está ofreciendo incluso descuentos en los restaurantes y entradas gratuitas a sus museos para todo aquel que vaya a ser vacunado.
En ese país están haciendo la corrida más importante en términos de personas inoculadas, porque van a entrar al segmento de gente joven de entre 12 años para arriba, lo que significa un nuevo espacio para concluir el próximo 4 de julio con un país completamente vacunado y con números de personas fallecidas que ha caído a números realmente notables.
En el caso de Inglaterra, que también ha vacunado a mucha gente con la Astrazeneca, en el día de ayer no hubo ningún muerto, estableciendo un récord que no acontecía desde marzo del año pasado, cuando el Covid impactó de manera decisiva a nivel global.
Los nuestros todavía siguen pensando en cómo endeudarse para pagar un viaje a Miami o a Nueva York. Aunque lo único que les frena a muchos es que el consulado norteamericano no está expidiendo visas y no hay posibilidades de ingreso a ese país sin ese requisito legal.
Si fuera por las posibilidades de que cada paraguayo vaya y gaste US$ 1.000 para ser vacunado en Miami o en Nueva York y retornar al país, esa cifra es mucho menor a lo que pagaría si tuviera que estar internado en una unidad de terapia intensiva de un hospital privado.
Estas cosas realmente son lamentables y nos demuestran las velocidades diferentes que imprimen los países desarrollados de los subdesarrollados como el nuestro.
