El título es una expresión cubana que paraguayazida sería “hendy kavaju resa” y lo usamos para expresar cuando todo se pone difícil, complicado y fuera de control. La situación de la pandemia en Cuba es grave y sus efectos aún peores y donde al mismo tiempo que su población busca comer diariamente están desarrollando una vacuna contra el covid sin embargo tuvo estos días un hecho singular: la salida del poder público del último de los Castro que llevan gobernando ese país por más de 61 años.
Raúl Castro, hermano de Fidel, dejó el control del partido comunista, única fuerza política autorizada en esa isla del autoritarismo. Lo sustituye el actual presidente de forma interina y se abren interrogantes sobre el futuro de Cuba sobre el que se llevan escritas varias páginas que nunca concluyen bien. Miguel Díaz-Canel de 60 años, miembro del partido comunista de Cuba tiene la presidencia en un momento en que las papas queman por lo que implica galopar sobre un caballo desbocado por los nervios de la pandemia aunque se registran números bajos comparando con otras naciones.. 500 muertos y 91.448 casos confirmados son los números sobre los cuales -como cualquier país- no democrático se duda y mucho.
El gerenciamiento del país es complejo y más en pandemia, Diaz debe animarse a asumir una posición seria y madura para responder a las demandas ciudadanas cuyo coro de malestar empieza a oírse de manera más rotunda. La sombra de los Castros todavía seguirá incluso tras la muerte de Raul Cuba ha sido gobernada desde su independencia a finales del siglo XIX por satrapìas de distintos tonos y colores. Ahora que las papas queman veremos cuanta originalidad tienen para zafar de esta situación dramática que viven en la isla. La vacuna Soberana puede ser un golpe de efecto notable como lo fue playa Girón en su historia.
