Existir bien, en orden y sin complicaciones implica muchas responsabilidades, ubicarlas, asumirlas y emprenderlas sin problemas para evitar que otros dilemas mayores o menores aparezcan en nuestros viajes en el existir. El mismo que no solo implica alimentarse, asearse y vestirse para lucir bien en algún momento o lugar específico para evitar tener conflictos con una o varias cosas que por no haber previsto lo que implican sus objetivos.
Desde el ser concebidos se nos presentan distintos desafíos en la vida. Desde el respirar, que requiere de la agresividad del médico encargado en traer a la vida a un nuevo ser humano el mismo que tiene minutos, horas, días, semanas, meses y años y el tiempo que desee tener en su vida para hacer de la misma una herramienta que sirva a sí mismo cómo a los demás para lograr alcanzar desafíos.
Los mismos aumentan a medida que envejecemos y las tareas que vamos asumiendo trabajarlas, sean estas académicas, laborales, lúdicas, familiares o sociales. Los mismos que son puestos en entredicho por fines específicos para nuestra comodidad mental, espiritual y financiera que a su vez responden a demandas urgentes o no que tengamos de acuerdo a nuestros estados de salud, y el nivel y estado de las deudas que tengamos en relación a algo específico.
Ellas solo tienen la chance de ser bien respondidas si tenemos la seguridad de contar con una entrada mensual; sueldo o salario que poseemos si hemos prestado un servicio con nuestra fuerza física, mental o cómo sea que podamos hacer real algo que precise la empresa u organización que contrate nuestros servicios.
Los retos del empleo
El emplear o ser empleado para algo específico es uno de los desafíos más repetidos hoy día, en nuestros tiempos de crisis económicas. baja, poca o nula estabilidad económica ya no solo de personas específicamente sino de compañías, sociedades y países que debido a su volumen llaman la atención y llegan al nivel de volverse en titulares de varios medios de comunicación que cubrimos con preocupación la falta de empleos. Y eso sin contar, lo difícil que supone hacerse de y sostener un trabajo.
Los días del 2023 están muy cerca de acabar y a su vez abrimos las puertas del tiempo que nos puede ser o no útil de acuerdo a la forma en que administremos nuestro tiempo y realmente ganemos nosotros y nuestras empresas cuyos objetivos, propósitos y fines debemos tener diseñados en común para hacer parejo nuestro arribo a puertos que sirvan para continuar todos para delante siempre.
La única dirección que debe existir para aquellos que emplean y son empleados si el éxito, la alegría y victoria son sus destinos y es cómo desde el principio de sus vidas la dirección que nos haya motivado a despertarnos e iniciar nuestras jornadas rumbo a enfrentar los desafíos que tengamos adelante.