Llama poderosamente la atención los últimos movimientos de Apple en contra de la libertad de expresión, pilar fundamental de la democracia.
Por un lado, ha retirado parte de su publicidad en Twitter, precisamente cuando esta red social ha dado marcha atrás a las políticas de censura, y, adicionalmente, ha amenazado con eliminar la red social de su tienda de aplicaciones. Con motivo, el nuevo presidente de Twitter, Elon Musk, ha preguntado al CEO de Apple, Tim Cook: “¿Odia la libertad de expresión en Estados Unidos o pone exigencias sobre moderación de contenidos?
La denuncia de Musk gana verosimilitud al saberse que Apple, en las últimas horas, actualizó su software en China para limitar AirDrop, una de las funciones diferenciales de los productos de Apple, una herramienta magnífica para compartir gran cantidad de información -fotos y videos- en muy poco tiempo y sin intermediarios. AirDrop estaba siendo usado por algunos ciudadanos chinos, que se han manifestado en los últimos días contra las violaciones a la libertad que implica la estrategia del Gobierno contra el Covid-19, para burlar las restricciones a la información de lo que está pasando realmente en China. Pero Apple se ha puesto del lado del opresor, posiblemente a petición del presidente Xi Jinping, y ha decidido limitar el alcance de la herramienta AirDrop en un momento tan delicado para los derechos cívicos y humanos.
De confirmarse estos hechos, Tim Cook pasará a la historia, no solo por ser el CEO que hizo crecer la capitalización bursátil de Apple en un 600%, duplicando con creces los ingresos anuales de la compañía, sino también por haberse aliado con la dictadura china y su policía, dedicada en estos días a revisar los móviles de los ciudadanos para ver si tienen Instagram, Twitter o Telegram y averiguar quiénes están a favor de las protestas. Pertinente es recordar en estos momentos la misión de Apple: “Llevar la mejor experiencia de usuario a sus clientes a través de su innovador hardware, software y servicios”. Apple, en su identidad más profunda, se centra en los usuarios, y este compromiso ha sido fundamental en su éxito, confiabilidad y reputación. Tim Cook deberá responder por esta alta traición.
