“La “zp44” nace de la necesidad no solamente de informar, sino de dar un espacio al oyente, nuestra programación incluye una gran variedad de espacios para el debate, la discusión de ideas y valorizar nuestra cultura. Creemos en la importancia de la educación para el bienestar y crecimiento social, por eso trabajamos muy de cerca con proyectos de radiodifusión locales e internacionales para difundirlos al aire y compartir mediante un canal accesible para el público en general, que es la radio”, fue lo que nos refirió su vicepresidenta, la Sra. Lizza Bogado.
LOS INICIOS
Hace algunos años le hicieron una entrevista a su fundador y recordó que, cuando le dijeron que su idea radial no sobreviviría tres meses, él les contestó: “La palabra creadora no tiene límites, inclusive en el Paraguay”.
Rescatamos los fragmentos más significativos de aquella nota:
–¿Qué le ha llevado a invertir en una radio?
–En 1997 veíamos que al dial paraguayo le hacía falta una radio como la nuestra. A la europea, al modelo de NPR de EE.UU., de las emisoras clásicas incluso de Paraguay, donde me tocó trabajar cuando tenía 18 años, cómo era Radio Chaco Boreal, dirigida por un español llamado Gerardo Torcida, en los tiempos de buen decir de Gerardo Halley Mora.
Luego vino la democracia, que rebajó el verbo al nivel del insulto y la procacidad. Nosotros dijimos que otro tipo de radio era posible y así nacimos para darle fuerza, compromiso y responsabilidad a la palabra. No fue una inversión fácil ni barata, comprar una radio, montarla de cero y hacerla sostenible desafía a cualquiera.
–¿Es posible sostener la calidad con viabilidad económica?
–Sí, y aunque cueste poco decirlo y mucho llevarlo adelante. En varios momentos sentimos que el esfuerzo para hacer algo diferente en el dial no era entendido por los auspiciantes. A veces pareciera en el Paraguay que la gente espera ver si eres capaz de aguantar, para luego confiar en tí. Esto es como un maratón y cualquier apasionado de la radio sabe que hay que saber aguantar, confiar y seguir adelante.
Varios auspiciantes creyeron en nosotros desde el inicio. A los demás los conquistamos en el camino o seguimos tozudamente interesados en que nos sostengan, con esta voz diferente en la radiofonía paraguaya. El dial 1200 tiene una larga tradición en el país, históricamente era la referencia de Caritas hasta que mudó su frecuencia a la 680.
“La radio es una hermosa chacra, no una estancia”, decía un comunicador argentino y tiene razón. Nadie ingresa a ella como propietario para hacerse rico, pero cómo disfruta uno haciendo comunicación con ella.
Paraguay es un país con un gran porcentaje de analfabetos, el principal diario del país vende menos de 25 mil ejemplares diarios para una población lectora de 3 millones. La televisión de Emergencias Médicas, del crimen callejero, del accidente rutero aburre y cansa, y creo que eso da oportunidades para que la radio crezca en credibilidad y cercanía.
Ha sido fascinante demostrar que se podía hacer una emisora sin agravios, malas palabras ni insultos. Hoy vemos que eso es posible, que podemos hacer crecer a la audiencia en capacidad reflexiva y crítica, que finalmente es el objetivo de cualquier medio de comunicación.
–¿Radio Libre es un buen negocio?
–Ella es una gema que quiere que la gente, el país, la comunidad crezca y se desarrolle. Estamos absolutamente de acuerdo con esa expresión que dice “de la salud del cuerpo habla la lengua”. Nosotros hicimos una limpia y clara como ambicionamos sea el país.
Radio Libre también es eso, familia. La mía cercana con Lizza, Santiago y Jessica, que hicieron y hacen radio y, sumado a ellos todos los que han pasado por la emisora y la han enriquecido extraordinariamente: Javier, Andrés, Claudia, Ana, Magda y varios otros nombres, que me sería muy difícil nombrarlos, han hecho de Radio Libre el lugar donde vive la palabra.
Como legado esta emisora ha instituido un premio a los luchadores por la libertad. Cada año en el aniversario se otorga la “Antorcha de la Libertad”, el más importante galardón a los forjadores de la libertad en el Paraguay en época de la dictadura del Gral. Stroessner y aquellas personas e instituciones que siguen liberándonos de los vicios que atormentan a la humanidad.
El premio ha sido otorgado anteriormente a Luis Alfonso Resck, Martin Almada, Domingo Rivarola, Dra. Gladys Sanneman, Miguel Angel Pangrazio, Radio Nederland, Maria Elena Sachero, Monseñor Melanio Medina, Rubén Bareiro Saguier, Enzo Di Tore, Alcibiades González Delvalle y muchos otros más.
Radio Libre, en su 24º aniversario, premiará a Sergio Velázquez Villagra por su gran labor a favor del desbloqueo de las listas sábanas y trabajo en convertir al paraguayo de simple votante en elector.