Comentario 3×3
Por Benjamín Fernández Bogado
Cuando uno pretende enfrentar una situación crítica que tiene múltiples factores, como ha sido la lucha contra el coronavirus, debe tener un buen equipo que sea capaz de llevar adelante varios propósitos al mismo tiempo. Tiene que tener un equipo administrativo que maneje la Hacienda Pública con mucho criterio y que sepa dónde habría que hacer los sacrificios para compartir entre todos esta desgraciada cuarentena que nos toca enfrentar.
Debería tener también un buenísimo equipo de administración en el área de salud que le diga a la población realmente a lo que se expone y con qué condiciones se encuentra el sistema sanitario y qué es lo que podría haber sido hecho durante estos seis meses y finalmente no se hicieron.
Cuando no se hacen todas estas cosas, hay una decepción, una frustración ciudadana que tiene un altísimo costo para enfrentar con éxito esta pandemia, porque hay una sensación de “Y a mí ya que me importa si finalmente les dimos unos US$ 1.600 millones para enfrentar todo esto”, lo que significa más del 12% del presupuesto general de gastos en todo este período y no vemos sus resultados. Al contrario, los hechos son más importantes por los casos de corrupción que se ventilan que por los éxitos que se han alcanzado durante todo este tiempo.
La sociedad paraguaya se encuentra desmoralizada ante una circunstancia de este tipo y más todavía cuando todas las noches les confirman los peores supuestos, la cantidad de personas internadas, ocupantes de terapia intensiva y los fallecidos. Desgraciada circunstancia en la que no ha habido un acompañamiento del Gobierno a los sacrificios individuales y ciudadanos que se han hecho.
