
La escuela creativa Kiraz Arte inició su colonia de vacaciones el pasado 1 de diciembre y ya prepara nuevas fechas ante la alta demanda. La fundadora y directora, Mayha Fretes, anunció que se habilitó un segundo llamado del 15 al 22 de diciembre, mientras que en enero se lanzará una edición completa para recibir a más niños y niñas.
La propuesta combina arte, creatividad y contención emocional en un espacio pensado especialmente para el desarrollo integral de los chicos.
Una propuesta accesible y con todos los materiales incluidos
La colonia tiene un costo de 300.000 guaraníes por semana, monto que incluye todos los materiales necesarios para las actividades. “Los niños solo necesitan venir, disfrutar y crear; nosotros nos encargamos de lo demás”, destacó Fretes, quien también señaló que las clases mensuales mantienen un precio accesible para las familias.
Inscripciones abiertas hasta completar cupos
El proceso de inscripción se mantiene abierto mientras queden lugares disponibles, ya que Kiraz trabaja con grupos reducidos para garantizar atención personalizada. Las familias interesadas pueden inscribirse a través del WhatsApp de Kiraz Arte, donde también reciben un PDF con toda la información detallada, horarios y requisitos.
Un espacio para crear, crecer y fortalecer la autoestima
Fretes explicó que su principal expectativa es que cada niño encuentre un entorno seguro, afectuoso y creativo. “Mi deseo es que vivan una experiencia que les ayude con la concentración, la paciencia, la motricidad fina y, sobre todo, con su autoestima y su alegría”, expresó.
Para la directora, la confianza de las familias es uno de los mayores motores del crecimiento de Kiraz. “Cada año seguimos ampliando horizontes y eso me llena el corazón”, agregó.
Kiraz Arte: un emprendimiento nacido desde cero y que hoy es una gran familia
La historia de Kiraz Arte comenzó en un pequeño espacio de la casa de Fretes. “Solo tenía dos habitaciones, y una la convertí en un taller de arte. Empecé con cuatro alumnos, mucho cariño y un sueño enorme”, recordó.
Lo que inició como un impulso para salir adelante se transformó en un centro creativo que hoy ofrece cursos de pintura sobre lienzo, dibujo anime y realista, yeso, acuarela, así como talleres para adultos de velas, lettering y pintura & vino. El lugar cuenta incluso con una sala de espera para padres que acompañan a sus hijos.
“Kiraz creció gracias al amor de cada familia. Aquí no solo enseñamos arte: enseñamos a creer en uno mismo”, afirmó la fundadora.
Periodista Senior