Este es el tiempo en que las siglas IA de inteligencia artificial han llegado a ocupar mucho espacio en titulares de medios de comunicación y tema de conversación en círculos sociales por lo que significa el reemplazar la mano de obra humana por una combinación de algoritmos, dispositivos y máquinas diseñadas para tareas específicas desde la contabilidad, transporte, cocina, limpieza, orden y aunque cueste asimilarlo también se encargaría de la medicina o atención de la salud humana. Algunas de sus aplicaciones son:
- Diagnóstico: la IA puede ayudar a los profesionales sanitarios a mejorar su capacidad de diagnóstico, lo que puede llevar a tratamientos más eficaces.
- Procesamiento de datos: la IA puede ayudar a procesar datos médicos para que los profesionales sanitarios puedan tomar decisiones clínicas más informadas.
- Imágenes médicas: la IA puede ayudar a los médicos a revisar imágenes como tomografías computarizadas y resonancias magnéticas para detectar problemas como cáncer y enfermedades cardíacas
- Enfermería: la IA puede ayudar a los enfermeros a identificar síntomas y condiciones con mayor rapidez y precisión.
Sin embargo la IA en la salud también puede presentar algunos riesgos, como:
- Daños a los pacientes por errores en los algoritmos
- Mal uso de las herramientas de IA
- Sesgos que perpetúan las desigualdades
- Falta de transparencia
- Problemas de privacidad y seguridad
- Brechas entre la responsabilidad real o artificial
Ampliando horizontes
Ahora incluso ya se habla de cómo la IA imita la naturaleza para reparar mejor los huesos. Algunos investigadores han ideado un material biomimético sintético diseñado mediante un programa de inteligencia artificial que, mediante impresión 3D, podría rellenar de forma óptima grandes huecos óseos, que al dejarse en este estado en algún momento podrían quebrarse y dañar la estructura y función de nuestro sistema óseo-muscular.
Algunas anomalías óseas que son;
- La Osteoporosis: que se produce cuando la pérdida de hueso es mayor que la formación de hueso nuevo, lo que hace que los huesos se debiliten y se vuelven más porosos
- Osteomielitis: una infección de los huesos que puede ser causada por bacterias que llegan a través del torrente sanguíneo, desde el tejido cercano o por lesiones que exponen el hueso a gérmenes.
- Osteoartritis: una enfermedad degenerativa que destruye el cartílago que recupera los huesos, lo que afecta la amortiguación y el movimiento de las articulaciones.
- Osteomalacia: causada por una deficiencia de vitamina D y puede provocar deformidades o fracturas en los huesos.
No se sorprenda el día de mañana si al llegar a cualquier centro médico, la cita clínica no es atendida por un ser humano cómo usted o yo que hable cara a cara con usted y lo evalúe observando sus ojos y oyendo sus palabras con curiosidad metódica para de esta forma lograr identificar el problema y recetar bien el medicamento o tratamiento que más se adecue para solucionar lo que no se encuentra funcionando bien en su organismo.
