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Humberto es nombre de pueblo despierto

Secretario General del Comité Central del Partido Comunista Paraguayo

Las madrugadas eran aliadas de la lucha revolucionaria. En esa oscuridad, valientes luchadores pasaban armas para luchar contra el criminal Stroessner. Humberto lideró durante mucho tiempo el equipo de paso. A su cargo estuvieron camaradas de la dirección del Partido Comunista, saliendo y entrando a Paraguay, por la frontera con Clorinda, Argentina. Además de armas y personas, Humberto también pasó importantes recursos económicos que se juntaban en solidaridad con la lucha por la democracia.

Hace unas horas llamaron a avisarme que acaba de fallecer. Este año cumpliría 83. Murió siendo Secretario General Adjunto del Comité Central del Partido Comunista Paraguayo. De oficio obrero carpintero, fue preso y torturado durante 8 años por el stronismo. Durante dos años estuvo engrillado con una cadena que no le permitía pararse. Así y todo, nunca lograron que cuente nada acerca del proyecto revolucionario.

Evaristo Antonio González era su nombre. Humberto era su seudónimo en la clandestinidad. Para nosotros siempre fue Humberto, el tenaz y valiente camarada, capaz de todo tipo de sacrificios para desarrollar el proyecto de nueva sociedad sin explotadores ni explotados. Portador de una belleza obrera cargada de coraje y solidaridad. Esa belleza obrera que con el ejemplo te enseña que una sociedad dirigida por la alianza obrero-campesina y popular es lo más noble, justo y hermoso que nos puede pasar, además de necesaria y posible.

Insistente y firme en las exigencias para la militancia, sobre todo en la planificación colectiva e individual y en el monitoreo y cumplimiento de los acuerdos, el camarada Humberto mostraba también su ternura ante los conflictos internos, buscando entender los motivos de las indisciplinas e incumplimientos, tratando de esbozar una crítica constructiva que permita la superación de los errores.

Hoy varias organizaciones levantan la bandera del Juicio y Castigo a quienes torturaron y saquearon durante el stronismo. Lo digo con total certeza: Humberto es el responsable de que hoy se tenga mayor conciencia de la necesidad del Juicio y Castigo como paso ineludible para construir democracia.

Despedir a personas como Humberto significa reforzar el compromiso para vivir con él para siempre. Y en este necesario homenaje, tomo las palabras de José Martí para decirles que “cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Esos son los que se rebelan con fuerza terrible contra los que les roban a los pueblos su libertad, que es robarles a los hombres su decoro. En esos hombres van miles de hombres, va un pueblo entero, va la dignidad humana”. Así de sencillo y bello fue Humberto.

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.

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