Se trata de la comunidad Kressburgo, ubicada en el Distrito de Carlos Antonio López, donde la violencia aumentó en los últimos años; extraños asesinatos, aparición de cuerpos, asaltos e incluso la explosión de una sucursal bancaria fueron algunos de los casos que despertaron la intranquilidad de sus pobladores, quienes vinculan los hechos a la gestión de los nuevos administradores del Grupo Kress.
Asalto y explosión de un banco:
El año pasado, los vecinos de Kressburgo, la mayoría dedicados a la agricultura, producción de granos, frutas y hortalizas despertaron de madrugada a causa de detonaciones en la zona. La sucursal del Banco Regional sufrió un intento de robo, en el que se utilizaron armas de fuego, explosivos, incluso dinamita en gel. Todo esto a tan solo unas seis cuadras de la comisaría local.
Hallazgo de restos óseos:
Apenas un par de días antes del atraco al Banco hallaron restos óseos de una mujer en la Colonia Palmital, a minutos de Kressburgo. El cuerpo no fue identificado al momento, ya que llevaba más de un mes en el lugar; una parada de colectivos ubicada en zona boscosa. No hubo ninguna denuncia alrededor del caso.
Captura de un criminal buscado internacionalmente:
Meses antes fue capturado en Kressburgo un ciudadano paraguayo requerido por la justicia argentina por un caso de triple homicidio vinculado al narcotráfico. Rolando Enrique Martínez Zeballo fue el criminal arrestado, quien se encontraba prófugo y residiendo escondido en la localidad. Finalmente fue extraditado en junio de 2022.
Extraño fallecimiento de una persona en el albergue de Frutika:
Otros casos llamativos surgieron en la zona, a principios de diciembre de 2022 un hombre identificado como Juan Ortiz falleció de un disparo de arma de fuego en circunstancias no determinadas, así mismo denunciaron varios casos de robo en la comunidad, sobre todo de motocicletas, llamativo para un pueblo pequeño y de gente trabajadora.
Kressburgo fue fundada hace casi 45 años. Su nombre es en honor al primer colono que se estableció en la zona a finales de los años 70; el Señor Heinfried Kress, quien con su esposa Beate Holtker desarrolló varias empresas, entre ellas la más conocida, Frutika, fundada en 1997. Es por ello, que gran parte de los habitantes de la comunidad están ligados a las empresas de la firma. Alrededor de 3500 personas en total habitan la zona según datos de la Unidad de Salud Familiar.
La comunidad se caracterizó durante los primeros años de su existencia por el constante avance, por la colaboración entre sus habitantes y por la responsabilidad social de las empresas asentadas, garantizando así una armonía tota el lugar. Esta realidad se vio alterada hace unos años, ya que en la zona se registran llamativos hechos de violencia e inseguridad. Por mucho tiempo, esta comunidad fue un ejemplo de trabajo y progreso, hasta el alejamiento temporal en 2008 de la propietaria de grupo Kress, Beate Holtker.
Derlis Pereira, titular de la Unidad del IPS en la localidad, comentó que los cambios en el lugar datan de hace unos años, coincidentemente con el alejamiento temporal de Beate Holtker, fundadora de la comunidad. El médico destacó que desde ese tiempo el desarrollo del lugar se estancó.
La situación en Kressburgo es preocupante, la comunidad se encuentra cercana a la frontera con Argentina y presenta índices de violencia inquietantes en un departamento relativamente tranquilo.
