Haití es una isla situada en la parte occidental de la isla La Española y limita al norte con el océano Atlántico, al sur y oeste con el mar Caribe y al este con la República Dominicana. Tiene una dimensión de 27.750 km² y una población de 11,45 millones de personas que intentan vivir entre sus dilemas económicos, inseguridad, alimentario, político y ahora se encuentra paralizada por disparos mientras el jefe de una pandilla amenaza al jefe de policía y a los ministros.
Jimmy Chérizier, un ex policía reconvertido en líder de una pandilla conocida como “Barbecue” quien fue visto en un vídeo grabado anunciando que el objetivo era matar al jefe de policía y a los ministros del gobierno e impedir que Henry, primer ministro haitiano regresará a Haití. “Con nuestras armas y con el pueblo haitiano liberaremos al país”, afirmó.
Un país en crisis recurrente
Haití tiene alrededor de 200 pandillas, de las cuales 95 están en Puerto Príncipe. Una realidad que la hace ser una de las islas más peligrosas y amenazantes contra el haitiano o extranjero que desee visitar esta paralizada nación por el descontrol y la violencia.
Según la ONU, en 2020 Haití tenía 18.884 inmigrantes, lo que equivale al 0,17% de su población. La inmigración masculina es mayor que la femenina, con 10.499 hombres (55,59%) y 8.385 mujeres (44,40%).
Las islas que conforman el caribe son Antigua y Barbuda, Barbados, Cuba, Dominica, Haití, Jamaica, República Dominicana, Granada, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía y Trinidad y Tobago.
Desafortunadamente entre ellas la isla del criollo haitiano padece serios dilemas producido por pandillas que son el resultado de la fragmentación social, la mala educación, pobreza extrema y desequilibrio económico que promueven el nacimiento y desarrollo de grupos criminales que llegan a controlar hasta la gestión de gobiernos produciendo lamentables hechos cómo lo registrado en la isla que una vez más es noticia por un hecho desolador.
El acontecimiento se dió durante la ausencia del Primer Ministro Ariel Henry, quien se encuentra en Kenia tratando de ultimar los detalles para el despliegue de una fuerza armada extranjera en Haití para ayudar a combatir a las pandillas no es una sorpresa para muchos. Seguirån los lios en esa isla caribeña.